Familiares de las víctimas de la masacre en Uvalde reaccionan al video de la lenta respuesta de la policía

El Concejo Municipal de Uvalde, Texas, aceptó la renuncia de Pedro Pete Arredondo como concejal este martes por la noche, en medio de las críticas al también jefe de policía por su demora para detener al asesino de la escuela primaria Robb.

Este martes, también se revelaron nuevas grabaciones de seguridad obtenidas por el diario Austin Statesman que muestran a detalle la brutalidad de la masacre en la que murieron 19 niños y dos maestras el mes pasado.

La publicación de los videos de las cámaras de seguridad de la escuela ha sido motivo de discusión pública durante las últimas semanas. Mientras que algunos políticos han argumentado que es necesario que se revelen íntegramente al público para que se sepa la verdad, familiares de las víctimas reaccionaron indignados a la filtración parcial del material este martes.

“No estábamos listos para verlo”, aseguró el padre de unas de las víctimas, que lamentó el que no se les permitiera verlo en privado antes.

El video, que puede herir la susceptibilidad del público, muestra las etapas de la masacre y está compuesto de varias grabaciones editadas por Austin Statesman y la estación KVUE, tomadas de una cámara de seguridad afuera de la escuela, una cámara en el pasillo, la cámara corporal de un agente, grabaciones de un teléfono celular y una llamada al 911.

Lo primero que revela son los momentos antes de que el atacante ingresara a la escuela, justo cuando acaba de chocar su vehículo y dispara en las inmediaciones del lugar. Luego lo muestra deteniéndose en uno de los pasillos de la escuela, pasándose las manos por el cabello antes de ingresar a los salones 111 y 112.

Segundos después, un niño se asoma por el pasillo por el que acaba de pasar el atacante y sale corriendo al escuchar los sonidos de los disparos de su rifle semiautomático.

Los medios citados editaron el video para eliminar el sonido de los niños gritando en el salón mientras el asesino descarga su arma. Las ráfagas que dispara se escuchan intermitentemente durante varios minutos.

Unos tres minutos después de que el atacante ingresó a la escuela, aparecen los primeros tres agentes corriendo a gachas por el pasillo para tratar de llegar a los salones de clases bajo ataque. En ese momento, se escucha una ráfaga de disparos y los oficiales se apresuran a ponerse a cubierto detrás del pasillo.

Los minutos pasan y la cámara del pasillo escolar muestra a los agentes yendo de un lado a otro, mirando planos de la escuela y hablando por sus radios, pero no se les ve que intenten ingresar al salón.

A los 19 minutos del ingreso del atacante llega el primer escudo balístico al pasillo de la escuela. Según Arredondo, esta era uno de los equipos que los agentes estaban esperando para poder avanzar con mayor seguridad por el pasillo hasta el salón donde estaban los niños y el asesino. Sin embargo, pasó casi una hora para que los agentes neutralizaran la amenaza.

Reacciones de indignación

Arredondo ha sido duramente criticado por retrasar la respuesta de los agentes. Tardaron 77 minutos en intervenir para abatir al atacante, desde que entró a la escuela (aunque su abuela ya lo había reportado media hora antes por dispararle en la cara y hubo otros informes de disparos cerca del instituto).

Arredondo fue suspendido de su cargo el 22 de junio y la semana pasada renunció como concejal de la ciudad tras las críticas.

Entre sus justificaciones está la supuesta falta de armas para afrontar al atacante y de una llave para abrir el salón de clases.

Sin embargo, ambas justificaciones fueron desmentidas por el director del Departamento de Seguridad Publica de Texas, Steve McGraw, quien ha señalado que los agentes contaban con un escudo balístico desde el minuto 19 y con suficientes armas y personal para enfrentarse al atacante tres minutos después de que ingresó a la escuela. También dijo que no trataron de abrir el salón de clases, que nunca estuvo cerrado bajo llave.

El video publicado por el Austin Statesman este martes parece reforzar las conclusiones de McGraw, pues muestra a decenas de agentes fuertemente armados esperando durante más de una hora en el pasillo, sin confrontar al agresor.

Incluso esperaron después de que se escucharon los últimos disparos en el salón de clases, 45 minutos después del ingreso del asesino a la escuela.

McGraw ha insistido en que los agentes debieron confrontar al asesino de inmediato, incluso si eso significaba que debían poner en peligro sus propias vidas.

Llamadas al teléfono de emergencias 911 entre las 12:03 y las 12:43 de algunas de las personas que estaban en las aulas revelan que los oficiales sabían que había gente con vida, incluso que una niña les urgió que ingresaran a salvarlos.

A las 12:50 pm, 77 minutos después del ingreso del asesino, un grupo de oficiales que esperaba fuera del salón finalmente ingresa y se escuchan varios disparos, en ese momento se termina el video que compilaron Austin Statesman y KVUE.

Según las autoridades, un agente de la Patrulla Fronteriza mató al atacante. Había llegado alrededor de las 12:15 con un grupo de tácticas especiales del Departamento de Seguridad Nacional fuertemente armado.

Investigadores estatales aún están tratando de determinar a partir de los análisis forenses cuántas víctimas murieron en los minutos que la policía estuvo esperando para actuar.

Un debate sobre la publicación del video

Desde hace varias semanas la comunidad de Uvalde y el público y los políticos en Texas han discutido la pertinencia de revelar al público los 77 minutos de grabación de las cámaras de seguridad de la escuela Robb.

El gobernador, Greg Abbott, fue una de la influyentes figuras que pidió que todo el material se hiciera del conocimiento público para que cada quien se pudiera hacer su propia idea sobre la respuesta de las autoridades locales.

Sin embargo, la publicación de un fragmento de este material, editado por los medios citados para excluir algunos detalles gráficos, ha causado reacciones encontradas entre padres de las víctimas y miembros de la comunidad.

“Sí, lo vi, todo el clip que mostraron, todos lo vimos. Es desgarrador porque lo revivimos todos los días, y ahora lo vamos a escuchar. No solo revivirlo, es algo que sigue”, dijo el padre de una de las víctimas. “Todo lo que sucedió al filtrarlo hizo que fuera simplemente devastador para nosotros. Estamos cansados de ver las cosas después de que los medios las consiguen. Nadie nos dice nada. Y es una falta de respeto, no solo para nosotros, sino también para la memoria de nuestros hijos”, agregó.

“No estábamos listos para verlo”, afirmó otro padre en la misma declaración conjunta desde Washington D.C este martes.

Ambos padres viajaron a la capital para asistir a una manifestación en contra de los rifles de asalto, que llevará a cabo la organización March Fourth el miércoles.

En contraste, el representante republicano Dustin Burrows celebró la publicación de un fragmento del video de seguridad, pero agregó que creía “importante que se pueda ver el segmento completo de la respuesta o falta de respuesta de los agentes de la policía local”.

En otro tuit Burrows lamentó que no se hubiese respetado el deseo de las víctimas de que se les permitiera ver el video primero y de que se excluyeran algunas imágenes y sonidos de la violencia.

Jesús Riso, tío de una niña que murió a los pocos días de haber hecho su primera comunión, afirmó que se había perdido la confianza con la policía local y que sería mejor “comenzar [de nuevo] con alguien diferente”.

“No hay palabras para expresar adecuadamente el dolor de nuestra comunidad. La grabación es descorazonadora y estamos profundamente molestos de que las familias y los seres queridos no hayan tenido la oportunidad de verlo en privado antes de que se hiciera público”, declaró la directora de comunicaciones del distrito escolar de Uvalde, Anne Marie Espinoza.