Nikolas Cruz era ‘frío, calculador, manipulador y mortal’, dicen los fiscales en el juicio por pena de muerte
Los fiscales pidieron al jurado integrado por 12 personas que se condene a Cruz a pena de muerte, mientras que la defensa pedirá cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional
Un fiscal que lleva el caso de Nikolas Cruz, el autor del tiroteo que dejó a 14 estudiantes y a tres adultos muertos en una escuela secundaria de Parkland, Florida, expuso una secuencia de hechos de la masacre en declaraciones iniciales de la fase de penalización de su proceso penal.
El acusado, quien ahora cuenta con 23 años de edad, fue “frío, calculador, manipulador y mortal” en su asalto en 2018, que duró alrededor de seis minutos, expresó el fiscal estatal Michael Satz.
En los tres días previos al tiroteo grabó un video en su teléfono celular y declaró: “Hola, mi nombre es Nik. Seré el próximo tirador escolar de 2018”, de acuerdo Satz.
Los alegatos iniciales marcan el principio de la fase de sentencia del juicio penal del Cruz y se da meses después de que se declarara culpable de 17 cargos de homicidio y 17 cargos de intento de homicidio.
Los fiscales pidieron a un panel de 22 personas, 12 jurados y 10 suplentes, que condenaran a Nikolas Cruz a la pena de muerte, mientras que sus abogados han solicitado una sentencia de cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional.
En este juicio, que se estima que dure varios meses, se profundizará en la vida e historial personal de tirador y contará los relatos de las familias de las víctimas y heridos de la escuela Parkland.
Los fiscales estatales empezaron sus declaraciones de apertura con una cronología precisa del asalto.
El 14 de febrero de 2018, Nikolas Cruz se dirigió en un Uber a la escuela secundaria Marjory Stoneman Douglas, ingresó al centro educativo y baleó a estudiantes adolescentes en el pasillo, disparó contra varias aulas y disparó a tres adultos que trataban de resguardar a los alumnos, dijo Satz.
Cruz regresó sobre sus pasos y disparó varias veces a las víctimas. Peter Wang, de 14 años, recibió 13 disparos de bala, expresó el fiscal.
El acusado disparó 139 rondas dentro del centro educativo, incluyendo 70 en el primer piso, dos en el hueco de la escalera, seis en el segundo piso y 61 en el tercer piso, de cuerdo con la fiscalía estatal.
El tirado dejó caer el rifle de asalto que llevaba y salió de la escuela mezclándose con las personas que huían de la masacre. Entro a un Subway a comprar un batido, incluso dejó propina y se lo bebió en una banca. Fue descubierto por un policía a una tres millas de la escuela tras una hora del tiroteo.
“Estos factores agravantes superan con creces cualquier circunstancia atenuante, cualquier cosa sobre los antecedentes del acusado, cualquier cosa sobre su infancia, cualquier cosa sobre su educación, cualquier cosa sobre su salud mental, cualquier cosa sobre su terapia, cualquier cosa sobre su atención”, enfatizó Satz.
El fiscal dijo a los integrantes del jurado que se les enseñaría un video de las cámaras de vigilancia desde adentro de la escuela que muestra la masacre.
En el juicio, Cruz estuvo sentado en silencio, usando gafas grandes, una mascarilla negra, una camisa con cuello y un suéter encima. Los padres y familiares de las víctimas lloraron en la corte y al menos uno de ellos se salió del recinto.
Por su parte, la defensa de Nikolas Cruz decidió retrasar sus declaraciones iniciales hasta más adelante en el juicio.
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