Graham votó en contra de la ley de matrimonio gay por no tener protección religiosa ante represalias
El republicano explicó que su negativa se debe a que no vio ninguna protección dentro de la ley del matrimonio homosexual que lo proteja de las creencias religiosas
El senador Lindsey Graham reveló a través de su cuenta de Twitter que él fue uno de los republicanos que votó en contra de la Ley de Respeto por el Matrimonio entre personas del mismo sexo, el cual fue aprobado en la Cámara del Senado con un gran número de votos a favor, pero el republicano dio las razones de su negativa y afirma que no tiene suficientes protecciones para la libertad religiosa.
El Senado aprobó hoy la Ley de Respeto por el Matrimonio, con la cual se conseguirá la igualdad de matrimonios entre personas del mismo sexo en la ley federal, allanando el camino para la aprobación final del proyecto de ley en la cámara esta semana.
En una votación de 62 a 37, los senadores acordaron finalizar el debate sobre el proyecto de ley y avanzarlo. Con un total de 12 republicanos que se unieron a los 50 miembros demócratas para votar a favor del proyecto de ley, superando los 60 votos necesarios para evitar una maniobra obstruccionista.
Uno de los miembros del Partido Republicano que votó en contra fue Lindsey Graham de Carolina del Sur, quien dio la razón que lo llevó a negarse a dar favorecer la ley, a través de su perfil en Twitter.
“Acabo de votar en contra de la Ley de Respeto por el Matrimonio que se supone protege el matrimonio homosexual sin crear riesgos para la libertad religiosa y las instituciones religiosas”, escribió el senador Graham.
“Nada en el proyecto de ley agrega nuevas protecciones para el matrimonio homosexual, pero en mi opinión, crea una gran incertidumbre sobre la libertad religiosa y las instituciones que se oponen al matrimonio homosexual”, continuó.
El motivo que orilló al republicano de rechazar la ley se debe a que las instituciones religiosas podría poner represalias en contra de los matrimonios gays y esto no fue abarcado dentro de la ley.
“La negativa a adoptar la enmienda del Senador Lee, que claramente protege a las instituciones religiosas de represalias, dice todo lo que necesito saber sobre los riesgos potenciales del proyecto de ley para la libertad religiosa”, argumentó en su post.
Por su parte, el senador de Utah, Mike Lee explicó que sí habría apoyado el proyecto de ley si tuviera una enmienda que protegiera el estado de exención de impuestos de las organizaciones que se oponen al matrimonio entre personas del mismo sexo por creencias religiosas, pero la idea fue descartada.
Las parejas pensaban que todo se encontraba en orden cuando la Corte Suprema de los EE.UU. legalizó el matrimonio entre personas del mismo sexo en 2015, pero la alarma se encendió después de que se anulara Roe v. Wade, ya que existía el temor de que los jueces examinaran la ley del matrimonio entre personas del mismo sexo y pusieran en riesgo los derechos.
Con el temor de que la Corte Suprema haga lo mismo de anular los privilegios del matrimonio gay, la administración Biden se movió para poder codificar el matrimonio entre personas del mismo sexo e interracial con la introducción de la Ley de Respeto por el Matrimonio, la cual entrando en vigor exigiría que las personas se consideren casadas en cualquier estado siempre que el matrimonio sea válido en el estado donde se realizó el enlace.
El presidente Biden defendió el proyecto y expresó que, “el amor es amor y los estadounidenses deberían tener derecho a casarse con la persona que aman”.
Después de recibir la mayoría de votos a favor, ahora este proyecto de ley pasará por una discusión adicional en el Senado y puede enfrentar una segunda votación para cerrar el debate.
Aproximadamente 6 de cada 10 adultos (61 %) expresan una opinión positiva sobre el impacto que tiene que el matrimonio entre personas del mismo sexo sea legal, incluido el 36 % que dice que es muy bueno para la sociedad.