Qué es la microbiota intestinal y cómo mantenerla sana

Cada vez son más comunes los conceptos “microbiota” y “microbioma” intestinal. Se trata de un genoma colectivo de las comunidades microbianas que viven dentro y sobre nosotros.

Estas comunidades microbianas se encuentran en nuestra piel y en nuestra boca, tracto respiratorio, tracto urinario e intestino.

Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de EE. UU. y los Institutos Nacionales de la Salud (NIH) están buscando aprovechar el microbioma en busca de nuevas formas de prevenir las infecciones resistentes a los antibióticos.

Cada persona tiene una red de microbiota completamente única que originalmente está determinada por el ADN individual. Nos exponemos por primera vez a los microorganismos cuando somos bebés, durante el parto en el canal de parto ya través de la leche materna.

Conforme crecemos, las exposiciones ambientales y la dieta pueden cambiar el microbioma para que sea beneficioso para la salud y en otros casos puede causar mayor riesgo de enfermedad.

Las comunidades microbianas trabajan en simbiosis con nuestro cuerpo para evitar que nos enfermemos.

Recomendaciones para tener una microbiota saludable

Si hay una alteración en el equilibrio de la microbiota se pueden generar enfermedades infecciosas, debido a la ingesta de ciertas dietas o el uso prolongado de antibióticos u otros medicamentos que destruyen las bacterias.

Puedes mantenerla saludable con las siguientes recomendaciones:

1) Prebióticos

La mejor manera de nutrir nuestra microbiota intestinal es marcarnos el objetivo de consumir semanalmente 30 alimentos de origen vegetal distintos (incluyendo frutas, verduras, cereales integrales, legumbres, frutos secos y semillas), ricos en fibras prebióticas.

2) Probióticos

Son una buena forma de ingerir la cantidad y diversidad apropiadas de microorganismos beneficiosos, principalmente compuestos por bacterias, pero también levaduras.

Los probióticos se encuentran en alimentos como el yogur y el chucrut. Son alimentos que contienen microorganismos vivos (bacterias y hongos) fruto de la fermentación actúan de forma positiva para recuperar el equilibrio de la flora intestinal.

3) Simbióticos

Una combinación de microorganismos vivos y uno o más sustratos utilizados selectivamente por microorganismos del huésped que confiere un beneficio para la salud.

Por ejemplo la leche materna tiene bacterias lácticas y en fructoligosacáridos que favorecen el desarrollo de las bacterias. Las leches maternizadas también contienen probióticos y prebióticos.

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