Macabro hallazgo en Guerrero: Abandonan un taxi con 3 cuerpos decapitados en el maletero
La ciudad de Chilpancingo, Guerrero, volvió a ser el escenario de un macabro hallazgo al encontrarse los cuerpos decapitados de 2 hombres y una mujer dentro del maletero de un taxi
Los cadáveres se encontraban maniatados y con los pies atados hacia atrás. Crédito: X/@SolChilpancingo | Cortesía
En el estado mexicano de Guerrero no para la violencia. Esta vez se trata de un macabro hallazgo en Chilpancingo: tres cuerpos decapitados en el interior de un taxi, el cual fue abandonado sobre un boulevard.
Las autoridades revisaron la unidad y hallaron en el maletero los cuerpos decapitados de una mujer y dos hombres. También hallaron una cartulina con un mensaje que aún no ha sido revelado.
Además, los tres cadáveres se encontraron maniatados y con los pies atados hacia atrás.
Todo esto ocurre en medio de una aparente tregua entre Los Ardillos y Los Tlacos, dos grupos criminales que operan en la región, y los cuales controlan diversos sectores como la distribución de carne de cerdo, res y pollo, además de la venta de refresco, cerveza, operación de bares, centros nocturnos y transporte público.
El diario El Universal menciona que el director del Centro de Defensa de los Derechos de las Víctimas de la Violencia, el sacerdote José Filiberto Velázquez Florencio, aseguró que él fue el intermediario para que Los Ardillos y Los Tlacos pactaran la tregua, conveniente para proteger sus negocios.
El sacerdote ha dicho en entrevistas que, el pasado 14 de febrero, líderes de los dos grupos del crimen organizado en cuestión, Onésimo Marquina Chapa, de Los Tlacos, y Celso Ortega Jiménez, de Los Ardillos, sostuvieron una llamada telefónica donde pactaron un cese a la violencia, después de que asesinaron a siete choferes, uno de ellos en el interior de su vehículo, e incendiaron cinco unidades más.
Tras estos hechos, la seguridad se reforzó con 500 soldados y policías, pues la ciudad estaba paralizada de miedo e incertidumbre.
La guerra que asfixia Chilpancingo
El sacerdote Velázquez considera que con estos recientes hechos violentos, aunados a otros terribles hallazgos en el estado, la tregua ha llegado a su fin.
Tan solo, durante la madrugada del 7 de julio, en la Autopista del Sol, en Chilpancingo, fueron halladas cinco bolsas negras con restos de tres cadáveres desmembrados, acompañadas del mensaje “por andar extorsionando y andar robándole a la gente sus propiedades”, según informa el Universal.
En tanto, el 24 de junio fueron hallados siete cuerpos desmembrados en el centro de Chilpancingo; cuatro de ellos presuntamente pertenecientes a una familia reportada como desaparecida el 10 de junio cuando salían de la ciudad.
Luego de su desaparición, en redes sociales circuló un video en el que aparecen los cuatro integrantes de la familia con las manos atadas mientras son interrogados. En dicha grabación, la familia admite haber participado en el asesinato del director del Hospital Comunitario de Quechultenango, Miguel Ángel Casarrubia Pérez, en Chilpancingo, además de prestar servicios a un grupo criminal que no fue especificado.
El motivo de dicho crimen estaría relacionado a que el director del Hospital brindaba atenciones a miembros de Los Ardillos, el cual opera en distintas zonas del estado de Guerrero.
Los Tlacos surgieron como una policía comunitaria dedicada a enfrentar al narcotráfico durante 2017, pero con el paso de los años, pasaron de ser autodefensas a un grupo generador de violencia en distintos municipios y recientemente han sostenido disputas con otros cárteles menores, como el Cártel del Sur, para tener el control de los campos de amapola.
Los Ardillos, por su parte, empezaron como parte del Cártel de los Beltrán-Leyva y ahora tienen su base de operaciones en una localidad aledaña a Chilpancingo. A lo largo de casi 20 años han sido acusados de delitos como narcomenudeo, extorsión y desaparición forzada.
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