Ford preservará su esencia deportiva en la era eléctrica
A pesar de la transición hacia una línea más electrificada, Ford no planea abandonar su legado deportivo y seguirá ofreciendo vehículos de sus grandes versiones
La industria automotriz vive una transformación sin precedentes, impulsada por la electrificación y nuevas regulaciones ambientales, pero Ford se rehúsa a dejar de lado su identidad.
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Mientras la compañía del óvalo azul se adentra en una estrategia cada vez más electrificada, mantiene firme su compromiso con sus raíces deportivas.
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Amko Leenarts, jefe de diseño de Ford, ha dejado claro que los próximos modelos de la marca combinarán la eficiencia y sostenibilidad de los vehículos eléctricos con la emoción y el rendimiento de las versiones deportivas que han hecho historia.
Durante una reciente entrevista con Autocar, Leenarts abordó el futuro de los vehículos de alto rendimiento de Ford, asegurando que el espíritu de Ford Performance seguirá vivo en los próximos lanzamientos.
“La deportividad no es solo una característica; es parte de la identidad de Ford”, enfatizó.
El diseñador detalló cómo esta filosofía influirá en los nuevos modelos, incluso en un contexto donde el Fiesta ST y el Focus RS están desapareciendo y el enfoque de la empresa se desplaza hacia los SUV y vehículos eléctricos.
Ford Performance, una división que ha dado vida a modelos legendarios y competiciones icónicas, será clave en esta nueva etapa. Leenarts explicó que el ADN de Ford Performance debe estar presente en los coches de uso diario, no solo en modelos exclusivos.
Desde el Dakar hasta el Campeonato Mundial de Rally y Pikes Peak, Ford ha demostrado que la pasión por el automovilismo es parte integral de su marca, y esta esencia continuará en sus próximos modelos eléctricos.
El director de diseño subrayó que el mercado actual está lleno de vehículos con una estética distintiva, y que existe una “libertad sin precedentes” para crear coches únicos.
En su opinión, la industria se encuentra en un “momento fantástico”, y Ford tiene la oportunidad de crear algo completamente diferente sin seguir los pasos de otras marcas. “No se trata de copiar a los alemanes”, comentó Leenarts, en referencia a la competencia en diseño. “Es el momento de reinventarnos y contar nuestra propia historia”, agregó.
A diferencia de otras marcas que buscan uniformidad y funcionalidad, Ford pretende llevar la personalización y el carácter único de sus modelos a un nuevo nivel, con vehículos que, según Leenarts, “cuenten una historia y transmitan personalidad”.
Esta visión concuerda con los comentarios recientes de Jim Farley, CEO de Ford, quien ha expresado su deseo de abandonar los coches “aburridos” en favor de vehículos que realmente conecten con el usuario y mantengan viva la pasión automotriz.
Ford: una estrategia hacia la emoción y la innovación
Para Ford, la electrificación no significa comprometer el placer de conducción. De acuerdo con Leenarts, la empresa está enfocada en ofrecer vehículos que ofrezcan una experiencia de manejo emocionante, manteniendo el atractivo de las versiones deportivas.
Modelos como el Mustang Mach-E y el Puma ST son solo el comienzo de una nueva era donde la tecnología eléctrica y la emoción del motor se combinarán para satisfacer a los fanáticos de la velocidad y la adrenalina.
La estrategia de Ford también se alinea con la tendencia global hacia los SUV y vehículos versátiles, pero con un toque distintivo que los diferencie en el mercado saturado.
Aunque el enfoque principal de Ford estará en el rendimiento y la personalidad de sus vehículos, la marca busca mantener un equilibrio entre practicidad y deportividad.
Ford Performance: el alma de los futuros eléctricos
El legado de Ford Performance es fundamental para esta evolución. Desde su participación en las competiciones más prestigiosas hasta el desarrollo de modelos icónicos de alto rendimiento, la división ha dejado una marca imborrable en la historia del automovilismo.
Para Leenarts y su equipo, la misión es clara: traducir esta rica herencia en vehículos eléctricos que transmitan la misma pasión y carácter que sus predecesores a combustión.
Con una mentalidad innovadora y la libertad para experimentar en el diseño, Ford espera atraer tanto a los fanáticos de siempre como a una nueva generación de conductores interesados en la sostenibilidad sin renunciar a la deportividad.
“Es el momento de darle a la gente vehículos que no solo respondan a sus necesidades, sino que también tengan una historia que contar y personalidad”, señaló el jefe de diseño.
Ford ha sido sinónimo de modelos icónicos, y esta transición hacia la electrificación busca honrar esa historia. La marca está trabajando en propuestas que respeten el legado de versiones pasionales y deportivas, adaptándolas a un futuro más responsable con el medio ambiente.
El reto de combinar tradición e innovación
Para Ford, la clave en esta nueva era radica en equilibrar la innovación con su identidad clásica. A medida que abandona algunos de sus modelos más antiguos y da la bienvenida a opciones completamente nuevas, la marca asegura que mantendrá su esencia de rendimiento y deportividad.
Esta estrategia apunta a crear una nueva generación de vehículos eléctricos que continúe inspirando a sus seguidores.
Ford no se conforma con ofrecer vehículos funcionales; quiere que cada modelo sea una declaración de estilo y pasión.
Con Leenarts liderando el diseño y un equipo comprometido en preservar la esencia de Ford Performance, los próximos años prometen ser una emocionante combinación de tradición y vanguardia.