Tecnología de vanguardia: Mercedes y sus baterías sólidas

Mercedes-Benz, junto con Factorial Energy, acelera el desarrollo de baterías de estado sólido, prometiendo autonomías de más de 1,000 kilómetros

Mercedes-Benz GLE

Mercedes-Benz GLE. Crédito: Mercedes-Benz. Crédito: Cortesía

La industria automotriz se encuentra en un momento de transformación profunda, y Mercedes-Benz lidera este cambio con una innovación que podría redefinir los estándares de la movilidad eléctrica.

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En colaboración con Factorial Energy, la marca alemana avanza rápidamente en el desarrollo de baterías de estado sólido, una tecnología que promete autonomías de más de 1,000 kilómetros, mayor densidad energética y costos de producción significativamente más bajos.

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Este avance es parte del compromiso de Mercedes-Benz hacia la electrificación total de su gama, un objetivo que, aunque extendido de 2030 a 2035, sigue siendo prioritario.

Estas baterías, que podrían revolucionar la eficiencia y el diseño de los autos eléctricos, podrían estar listas para pruebas en carretera en los próximos meses.

Un salto cuántico en tecnología de baterías para Mercedes-Benz

Las baterías de estado sólido representan un cambio de paradigma en comparación con las baterías de iones de litio convencionales. Factorial Energy, socio clave de Mercedes-Benz en este proyecto, ha desarrollado las celdas “Solstice”, capaces de aumentar la densidad energética en un 80%.

Este incremento permitirá que los vehículos eléctricos mantengan o incluso mejoren su autonomía mientras se reduce significativamente el tamaño de las baterías.

Según el CEO de Factorial, Siyu Huang, las celdas actuales cuentan con una capacidad de 40 Ah y han demostrado en pruebas una durabilidad excepcional, superando los 2,000 ciclos de carga y descarga sin degradación significativa.

Además, el nuevo proceso de recubrimiento de cátodos secos está transformando la fabricación de baterías al mejorar la eficiencia y reducir los costos.

Impacto en diseño y rendimiento vehicular

La innovación en baterías no solo afecta el rendimiento, sino también el diseño de los vehículos. Al reducir el tamaño de las baterías sin sacrificar capacidad, los autos pueden ser más ligeros y compactos.

Esto no solo mejora la eficiencia energética, sino que también permite un menor costo de producción, lo que podría traducirse en vehículos eléctricos más accesibles para el consumidor final.

Markus Shafer, director de tecnología de Mercedes-Benz, destacó que las baterías de estado sólido serán “la piedra angular” de la estrategia de la marca.

Dichas no solo establecerán nuevos estándares de autonomía y rendimiento, sino que también permitirán una integración más eficiente en el diseño de los vehículos.

Durabilidad y eficiencia: claves para el éxito

Uno de los aspectos más impresionantes de las baterías de estado sólido es su durabilidad. Durante las pruebas, los prototipos han mostrado una vida útil considerablemente mayor a las baterías tradicionales, lo que podría reducir la necesidad de reemplazos y, por ende, los costos a largo plazo para los propietarios.

Mercedes-Benz ajusta su estrategia eléctrica para crecer
Logo de Mercedes-Benz. Crédito: Mercedes-Benz.
Crédito: Cortesía

Además, el proceso de fabricación optimizado, como el recubrimiento de electrodos secos mencionado por Alex Yu, director de tecnología de Factorial, mejora la escalabilidad de la producción. Esto es crucial para que la tecnología pueda ser adoptada de manera masiva sin enfrentar las limitaciones de producción que han afectado a otras tecnologías emergentes.

Pruebas y lanzamiento al mercado

Mercedes-Benz planea iniciar pruebas en carretera con vehículos equipados con estas baterías en los próximos meses. Aunque no se ha confirmado qué modelo será el primero en incorporar esta tecnología, las especulaciones apuntan a que podría tratarse de un modelo de lujo de la línea EQ.

Estas pruebas serán cruciales para validar la viabilidad comercial de las baterías de estado sólido y ajustar los últimos detalles antes de su lanzamiento al mercado.

Si los resultados son positivos, Mercedes podría comenzar a ofrecer esta tecnología antes de que termine la década, consolidándose como pionero en este campo.

Un futuro electrificado y sostenible

El compromiso de Mercedes-Benz con la sostenibilidad no se limita a la electrificación de su flota. La producción de baterías de estado sólido también tiene un menor impacto ambiental en comparación con las baterías de iones de litio actuales. Esto se debe a la eliminación de ciertos materiales tóxicos y al uso de procesos de fabricación más limpios y eficientes.

Además, el tamaño reducido de las baterías podría permitir una mayor optimización del espacio interior de los vehículos, ofreciendo más comodidad y opciones de diseño para los consumidores.

Mercedes-Benz está allanando el camino hacia un futuro donde los vehículos eléctricos no solo sean sostenibles, sino también más eficientes, accesibles y atractivos para una audiencia global.

La asociación con Factorial Energy y los avances en baterías de estado sólido destacan el compromiso de la marca con la innovación y la excelencia.

Con autonomías que superarán los 1,000 kilómetros, diseños más ligeros y un enfoque sostenible, las baterías de estado sólido podrían convertirse en el estándar de la industria en los próximos años. Mercedes-Benz, una vez más, demuestra que liderar no es solo una elección, sino un compromiso con el futuro.

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