El número de visas H-1B para empresas indias ha registrado una caída en los últimos meses
De acuerdo con un estudio, la reducción para firmas indias, está relacionada con un mayor uso de tecnológicas nacionales
Recientemente, el presidente Donald Trump impuso al visado H-1B para trabajadores temporales una tarifa de solicitud de $100,000. Crédito: Cristian Storto | Shutterstock
La cantidad de visas H-1B concedidas a empresas con sede en India registró una caída significativa durante el año fiscal 2025, según un análisis reciente de la Fundación Nacional para la Política Estadounidense. El reporte muestra un cambio notable en la estructura del programa, especialmente en lo relacionado con el patrocinio de empleo inicial.
Solo tres compañías indias lograron situarse entre los 25 empleadores con más peticiones aprobadas para nuevas contrataciones H-1B. La disminución ilustra la transformación del mercado, mientras las grandes tecnológicas estadounidenses amplían su demanda de profesionales extranjeros para fortalecer proyectos de inteligencia artificial y tecnología avanzada.
El director ejecutivo de NFAP destacó que las empresas indias ahora operan con un número reducido de visas, mientras las corporaciones estadounidenses lideran la contratación de talento especializado, incluidos graduados internacionales. Según señaló, este giro está estrechamente ligado a las millonarias inversiones en desarrollo de inteligencia artificial en territorio estadounidense, afirmó Stuart Anderson.
El debate adquiere relevancia en medio de las discusiones sobre inmigración altamente calificada y competitividad tecnológica. La administración Trump sostiene que el país necesita talento extranjero para cubrir vacantes críticas, pese a la oposición de sectores del movimiento Make America Great Again, que consideran estas visas como una amenaza para los trabajadores locales.

Transformación del programa H-1B
El informe reveló que las siete principales empresas indias sumaron 4.573 aprobaciones para empleo inicial, una reducción del 70 % frente a 2015. La caída también representa un descenso del 37 % respecto al año fiscal 2024, reflejando el desplazamiento hacia el patrocinio estadounidense dentro del programa.
Las visas destinadas a empleo inicial corresponden en su mayoría a nuevas contrataciones y se contabilizan dentro del límite anual de 65.000 permisos, además de 20.000 exenciones para profesionales con maestrías en universidades estadounidenses. Esta dinámica ha fortalecido el rol de compañías como Amazon, Meta, Microsoft y Google, que dominan las primeras posiciones.
El análisis de NFAP, basado en datos del Servicio de Ciudadanía e Inmigración, confirma que la reducción para firmas indias coincide con un mayor protagonismo de las tecnológicas nacionales. La tendencia refleja el avance de proyectos de innovación y la necesidad de ingenieros especializados en tecnología e inteligencia artificial.

En 2025, un total de 28.277 empleadores recibieron autorización para contratar al menos un nuevo trabajador H-1B. La mayoría presentó un número mínimo de solicitudes: el 61 % solo una petición y el 95 % diez o menos. Más de la mitad de las aprobaciones correspondieron a empresas con quince o menos contrataciones.
El informe también señaló que los traslados laborales entre empleadores continúan siendo frecuentes. Para el año fiscal 2025 se aprobaron 68.167 solicitudes de cambio de empleo, reflejando la movilidad dentro del sector tecnológico y corporativo estadounidense, especialmente entre roles altamente especializados.
Las tasas de denegación para empleo inicial se mantuvieron bajas, con un 2,8 % en 2025. La cifra supera levemente el 2,5 % del año anterior, pero permanece por debajo del 3,5 % registrado en 2023. El contraste con la primera administración Trump es marcado, cuando el rechazo llegó a 24 % en 2018.
Las visas H-1B continúan siendo esenciales para que trabajadores extranjeros especializados puedan ejercer en Estados Unidos. Sin este mecanismo, miles de profesionales optarían por otros destinos, afectando la competitividad del mercado laboral estadounidense y del ecosistema tecnológico global.
La propuesta de imponer una tarifa de $100,000 dólares para nuevas solicitudes generó inquietud entre los empleadores. La Cámara de Comercio y otros grupos sostienen que la medida es ilegal y podría perjudicar a sectores clave. La representante Marjorie Taylor Greene incluso impulsó un proyecto para eliminar gradualmente el programa.
Expertos y figuras públicas mantienen posiciones divididas. Anderson recordó que cerca del 70 % de los estudiantes de posgrado en áreas científicas son internacionales. Trump defendió la entrada de personal especializado para operar nuevas plantas industriales. Voces como Amanda Brill y Savanah Hernandez expresaron opiniones contrapuestas, mientras Greene insistió en que el sistema beneficia injustamente a grandes corporaciones.