Drones para llevar paquetes
Amazon dice que en un plazo de cuatro años los usarán para distribución
WASHINGTON D.C. Amazon, la mayor tienda electrónica del mundo, ha sorprendido a la comunidad virtual y no virtual con el anuncio de que en un plazo de cuatro a cinco años será capaz de distribuir parte de los miles de artículos que vende mediante aviones no tripulados o “drones”.
El anunció fue hecho por el presidente de Amazon, Jeff Bezos, en una entrevista televisiva en vísperas del “Ciberlunes”.
Bezos dijo el domingo en el programa 60 Minutes de la cadena CBS, que en unos años Amazon ofrecerá su servicio “Prime Air” con aviones no tripulados que entregarán las encomiendas a los compradores en treinta minutos.
El presidente de Amazon, que meses atrás sorprendió a los mercados y al público con la compra del diario The Washington Post, dijo que los “drones” podrán llevar paquetes de hasta dos kilogramos, que representan el 86% de las entregas que hace Amazon.
“Podría ser en un radio de unos 15 kilómetros desde un centro de despachos”, añadió. “Es decir, en áreas urbanas uno podría cubrir porciones muy significativas de la población”.
De inmediato, en Twitter y otras redes sociales se levantó una controversia entre quienes aprecian la promesa futurista y quienes temen que los robots voladores espíen a la ciudadanía.
Por su parte, Patrick Fitzgerald, vicepresidente de la empresa de paquetería FedEx, dijo que por ahora no le preocupa el plan de “drones” repartidores de Amazon.
“FedEx ha sido y sigue siendo pionera en la tecnología”, añadió. FeEx cuenta con su propia flota de camiones y de aviones, tripulados todos ellos, que reparte paquetes en todo el mundo.
“En esta temporada de fiestas esperamos distribuir 22 millones de paquetes diarios”, dijo Fitzgerald.
En gran medida el crecimiento rápido de la distribución de paquetes es resultado del comercio electrónico, que se ha triplicado desde 2005 espoleado por Amazon.com.
Uno de tuiteros que trató el tema de los “drones” de Amazon, que se identificó como Tim Siedell, escribió: “el momento más embarazoso será cuando el robot de Amazon se quede allí, sobre su casa, esperando la propina”.