Obama se reúne con Dreamers y sus familiares
Los invitados le manifestaron al presidente su deseo de que se apruebe cuanto antes una reforma migratoria
El presidente Barack Obama y el vicepresidente Joe Biden recibieron hoy en la Casa Blanca a Dreamers y familiares de indocumentados para compartir sus historias y la esperanza de que ahora sí se aprueba una reforma migratoria que resuelva su situación y la de sus padres, hermanos y allegados.
Entre los siete inmigrantes que conversaron esta mañana con el Presidente y vicepresidente, había tres latinos, dos sur coreanos, un marroquí y una estadounidense veterana de guerra y cuyo esposo inmigrante pasó años tratando de legalizar su estatus.
“Cada uno de nosotros contó su historia. Ellos escucharon y parecieron muy interesados en lo que decíamos. Para hacernos sentir más relajados hicieron algunos chistes”, dijo Justino Mora al salir de la reunión. “Les conté de mi familia y de mi madre, que es indocumentada”.
Mora indicó que cada vez que mencionó la lucha de su progenitora para ofrecerle a sus hijos una vida mejor “el Presidente me miraba a los ojos y conectaba conmigo”.
El mandatario le dijo a los presentes que lo mejor que podían hacer es seguir compartiendo sus historias. “Nos dijo que eso tendría el poder de hacer posible la reforma migratoria”, dijo Mora.
Justino Mora tiene 22 años, vive en Los Angeles y estudia en la Universidad de California en Los Angeles (UCLA). Justino, su hermano y hermana vinieron a Estados Unidos cuando eran niños. El y su hermano recibieron acción diferida recientemente y tienen suspendida su deportación pero su hermana Lucy aún no recibe respuesta a su solicitud. Lucy tiene un hijo de 8 años nacido aquí.
Entre los que se reunieron con el Presidente, en el mismo día en que el Comité Judicial está considerando las cláusulas de la ley relativas al Dream Act y el camino a la ciudadanía, también estaba Diana Colin, residente permanente y graduada de Cal STate Fullerton cuyos padres son indocumentados, Kevin Lee, un joven con DACA que vino a los 9 años que se graduó de UCLA y aspira a ser abogado para ayudar a su comunidad coreana y a los inmigrantes.
Otro de los presentes en la reunión fue Miguel Leal, un inmigrante cubano naturalizado estadounidense, casado con una uruguaya que no ha podido legalizarse a pesar de su matrimonio con Miguel por problemas de la ley.
Justino y Diana representaron en Washington a CHIRLA, la Coalición por los Derechos Humanos de los Inmigrantes de Los angeles. Angélica Salas, directora de CHIRLA, dijo que el objetivo de la reunión era inspirar al Presidente y vicepresidente a “tener más energía y confianza en su compromiso de aprobar la reforma migratoria sabiendo que es lo correcto”.
Hoy se espera que termine el trabajo del Comité Judicial con las enmiendas al Proyecto S 744 de Reforma a las Leyes de Inmigración.