Enlace: Las propuestas catastróficas de Trump
Las peligrosas declaraciones no tienen otro propósito que el de apuntalar su atribulada carrera
Si algo tenemos que reconocerle a Donald Trump, además de su talento para entretener a sus seguidores, es su infinita habilidad para generar temor e incertidumbre mediante toda clase de manipulaciones y mentiras. Los ejemplos sobran, basta recordar que inició su campaña a la presidencia con la declaración de que todos los mexicanos que emigran a Estados Unidos son criminales.
Desde entonces, su estrategia ha sido clara. Para atraer la atención de la prensa, prácticamente todos los días sorprende con un nuevo disparate. El último: que para obligar al gobierno mexicano a pagar por el muro que piensa construir en la frontera sur de Estados Unidos cortará una porción de las remesas que envían los mexicanos a sus familiares. Su plan, detallado en un memo al que tuvo acceso el Washington Post, prohibiría también a los indocumentados mandar dinero fuera de Estados Unidos.
El plan agrega que Trump levantaría esta amenaza si el gobierno mexicano paga entre $5 mil y $10 mil millones para financiar el muro y asegurarse así de que continúe sin problemas el flujo de las remesas, que el año pasado llegaron a $24 mil millones y son la principal fuente de ingresos para el país vecino.
Como de costumbre, Trump no toma en consideración las consecuencias de su absurda propuesta, entre ellas que la inmigración de indocumentados mexicanos repuntaría.
Hace unos días, el multimillonario lanzó otra bomba al asegurar que Estados Unidos está al borde de una recesión masiva, pero que si él llega a la presidencia resolverá la crisis antes de que explote.
Ningún economista serio ha respaldado hasta ahora la visión catastrófica de Trump. “No nos encaminamos a una recesión, ni masiva ni menor y el desempleo no es del 20% sino del 5%”, aseguró Bandholz, director de Economía de UniCredit Research en Nueva York.
Por lo que se ve, las peligrosas declaraciones de Trump no tienen otro propósito que el de apuntalar su atribulada carrera. La semana pasada el millonario tuvo su peor momento por las acusaciones de que su jefe de campaña, Corey Lewandowski, había agredido a una periodista y después por sus declaraciones de que las mujeres que abortan deben ser castigadas. El alud de críticas que enfrentó lo obligó a cambiar su postura cinco veces, lo que puso en evidencia una vez más su ignorancia y falta de tacto. El error le salió bastante caro: el 75% de las mujeres dice tener una opinión desfavorable de él.
La pregunta ahora es si, después de estos reveses, Trump podrá ganar la nominación de su partido. Lo que si es seguro es que, en el remoto caso que así sea, será uno de los candidatos republicanos más débiles en la historia.