La Opinión te recomienda: Sí a la Proposición 52
Vota Sí para asegurar seguros médicos
En este momento la Legislatura puede decidir “cambiar, extender o eliminar” el uso de fondos que se cobran a hospitales con un voto mayoritario.
Estos fondos se usan para atraer dinero federal (en programas federales que requieren “matching funds” del estado) o pagar por servicios de Medi-Cal.
¿Qué es la Proposición 52? Haz clic e infórmate.
Si se aprueba la medida, para usar esos fondos en otros fines se requerirá un voto popular, y para anular el programa se necesitará una mayoría extraordinaria de dos tercios de la Legislatura.
El Gobierno nacional ayuda a pagar por Medicaid (conocido en California como Medi-Cal) con fondos federales. Pero para recibir dichos fondos, cada estado debe contribuir con la misma cantidad. Esto es, por cada dólar que California gasta en Medi-Cal, recibe un dólar de fondos federales (matching funds).
Desde 2009, los hospitales privados pagan para ayudar al estado a recibir y aumentar el monto de dichos fondos, lo que a su vez hace que el gobierno federal complete las sumas que le aseguren a su vez fondos federales. Así, en 2015, el estado junto a los hospitales contribuyeron con aproximadamente $4,000 millones de dólares y recibieron a cambio otros $4,000 millones en fondos federales.
Este arreglo expira a fines de 2017. Pero si se aprueba la 52 el arreglo será permanente. El dinero no podrá destinarse a otros objetivos, como por ejemplo el Fondo General del estado.
Entre quienes apoyan la proposición se encuentra la Asociación de Hospitales de California, que desarrolló la medida, tanto el Partido Demócrata como el Partido Republicano de California y una larga lista de hospitales.
Quienes se oponen a la medida argumentan que los fondos federales se destinan sólo a los hospitales privados y no llegan a clínicas, ni a otros servicios necesarios de Medi-Cal, como cuidado preventivo y programas de salud. Según sus detractores, la medida favorece a corporaciones, CEOs y ejecutivos de hospitales privados y no garantiza que los fondos sean utilizados para servicios de salud.
La medida también ha recibido críticas por tratarse de un presupuesto decidido en las urnas (ballot-box budgeting) que ata las manos de la legislatura en casos de crisis presupuestarias.
Votemos sí, porque estos cobros de los hospitales son para financiar el Medi-Cal y el cuidado de salud para los niños y los pacientes sin seguro, una población que ha aumentado mucho a raíz de Obamacare y la ley que amplió el Medi-Cal para los niños indocumentados.
Aunque si bien es cierto que parte de esos fondos pueden perderse en la burocracia y en beneficios para los cabilderos, también es verdad que se utilizaba para el Fondo General del Estado -en por lo menos $260 millones- y de no aprobarse se perderían alrededor de 2,000 millones de dólares federales adicionales para Medi-Cal para los hospitales públicos y la salud de los más pobres.
Apoyamos la Proposición 52.