Agentes del LAPD han estado involucrados en 12 tiroteos en lo que va 2017

El jefe de la Policía de Los Ángeles (LAPD), Charlie Beck, dijo el martes que hubo un “aumento significativo” en disparos de los oficiales de la policía (LAPD) este año: 12 en 2017 en comparación con siete disparos en el mismo periodo del año pasado. Tres personas han sido asesinadas por disparos de la policía este año, por debajo de cuatro en este punto en 2016.

El número de disparos por parte de los oficiales ha causado la preocupación de sus jefes civiles.

El aumento inquietó a algunos de los comisionados de policía de la ciudad, que han centrado su atención en reducir el número de disparos por parte de los oficiales. Beck mencionó el número en la reunión semanal del panel, informando a los comisionados sobre los cuatro tiroteos más recientes que ocurrieron en un lapso de cinco días.

Los recientes tiroteos “me preocupan profundamente”, dijo la comisionada Shane Murphy Goldsmith.

Matt Johnson, presidente de la junta, dijo que además de la revisión de cada caso por la Comisión de Policía, la junta también analizaría las tendencias generales “para ver que tenemos que estar haciendo de manera diferente”.

“Es demasiado pronto para sacar conclusiones”, dijo Johnson. “Pero estoy muy preocupado”.

Los disparos de oficiales en ciudades de todo el país han provocado un debate acalorado y persistente sobre cómo la policía usa la fuerza, particularmente contra los afroamericanos. El LAPD no ha sido inmune a las críticas, ya que los manifestantes han llenado las reuniones de la Comisión de Policía y acampado afuera del ayuntamiento para protestar por los disparos de oficiales.

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El LAPD atrajo atención nacional el mes pasado cuando un agente fuera de servicio disparó su arma durante una confrontación con un grupo de adolescentes que caminaron a través de su propiedad en Anaheim. Nadie fue alcanzado por las balas. Investigadores dicen que un solo tiro fue disparado hacia el piso, pero el video del choque rápidamente se volvió viral, conmoción de protesta por las acciones del oficial.

Ese incidente está incluido en la cuenta del 2017 del LAPD.

El Departamento de Policía de Los Ángeles cuenta todos los tiroteos por parte de oficiales, tanto si están en servicio como si no, e independientemente si alguien fue golpeado por disparos.

Cuatro de los tiroteos de este año ocurrieron en un período de cinco días a partir del 4 de marzo. En ese día, oficiales dispararon y mataron a un hombre que tenía un tubo metálico en el centro de Los Ángeles. Dos días más tarde, los oficiales hirieron gravemente a una mujer que Beck dijo estaba apuntando con un rifle a la policía en Silver Lake.

Un día después, el 7 de marzo, la policía persiguió a un sospechoso en auto en Gardena, disparándole e hiriéndolo después de que él comenzó a apuñalar a una mujer dentro del carro robado. Al día siguiente, Beck dijo que los agentes dispararon una persona vinculada a un tiroteo de un auto a otro después de sacar una pistola durante una persecución en el sur de la costa sur.

“Tuvimos una terrible segunda semana de marzo”, dijo Beck en una entrevista el martes. “No sé cuál es la razón de eso”.

Siete personas han sido baleadas por el LAPD este año, dos más que en el mismo periodo del 2016, según cifras proporcionadas por el departamento.

Los números de fin de año han fluctuado en los últimos cinco años. Los oficiales de LAPD dispararon sus armas en 40 incidentes en 2016, frente a 48 el año anterior, pero arriba de 31 en 2014.

Los números hasta mediados de marzo también varían ampliamente. Aunque el LAPD ha visto un aumento este año, la docena de tiroteos están cerca de los 13 que el departamento registró en el mismo periodo en 2015. Para este momento en 2014, sin embargo, los oficiales habían disparado sus armas sólo tres veces.

En 2015, citando el aumento “alarmante” de los disparos, el presidente de la Comisión de Policía lanzó un agresivo esfuerzo para estudiar e intentar reducir el número de veces que los agentes dispararon sus armas.

Desde entonces, el departamento ha proporcionado a los oficiales un mayor número de dispositivos menos letales, como Tasers, y una amplia capacitación que se centra en desactivar los encuentros tensa sin utilizar la fuerza letal, y está actualizando su política de uso de la fuerza para mencionar específicamente los conocidos esfuerzos de “de-escalar” la situación.

Aparte del incidente en Anaheim -que Beck calificó de “caso aislado”- el jefe dijo que los tiroteos de este año “parecen ser agentes de la policía haciendo lo que nosotros esperamos que ellos hagan: Contestando llamadas al 911 y desafortunadamente siendo enfrentados por gente con malas y mortales intenciones”.

El jefe dijo que no había notado ninguna tendencia en los disparos de este año, pero enfatizó que el LAPD presta mucha atención cada vez que un oficial dispara su arma. Dos meses del año, los números son “muy volátiles”, agregó.

“Obviamente esperamos que ese patrón cambie a lo largo del año”, dijo a los comisionados.