La legendaria Aretha Franklin se encuentra gravemente enferma
Aseguran que sus familiares ya se están despidiendo de ella
Las últimas informaciones que circulan en torno al estado de salud de Aretha Franklin apuntan a que la cantante de 76 años se encontraría recluida en su casa de Detroit, donde ya se habrían reunido gran parte de sus seres queridos para despedirse de ella. Por el momento sus familiares no han querido pronunciarse oficialmente acerca del supuesto empeoramiento de su enfermedad, pero el portal Showbiz 411 asegura que han pedido que sus fans recen por ella y que se respete su privacidad en estos difíciles momentos.
La última aparición en público de Aretha tuvo lugar el pasado noviembre, cuando asistió a la gala de la fundación Elton John celebrada en Nueva York con el objetivo de recaudar fondos para la lucha contra el sida. En aquel momento la leyenda del soul hizo gala de una evidente fragilidad y solo pudo completar su actuación por pura fuerza de voluntad mientras luchaba contra la deshidratación y un agotamiento extremo.
Hace dos años la cantante se vio obligada a cancelar una serie de conciertos pese a la determinación de la que siempre había hecho gala desde que en 2010 le diagnosticaran un cáncer que trató de mantener en secreto durante meses, aunque eventualmente reconoció que se había sometido a una intervención para que le extirparan un tumor en el páncreas.
En aquel entonces su intención era renunciar a los escenarios y concentrar sus energías en seguir grabando música, pero el pasado agosto anunciaba sus planes para comprar un club cercano a su casa en el que ofrecer actuaciones puntuales: “Yo cantaría de vez en cuando y, por supuesto, invitaría a artistas muy especiales a que nos visitaran”, apuntaba.
Su optimismo a la hora de hacer planes de cara al futuro no impidió que en noviembre tuviera que hacer frente a un desagradable rumor acerca de su fallecimiento difundido a través de las redes sociales, al que respondió asegurando a todos sus admiradores que sus últimas pruebas médicas no habían arrojado resultados preocupantes.