3 formas de ahorrar dinero en tus medicamentos
Es muy posible ahorrar y cuidar tu salud con la misma calidad
Algunas medicinas podrían llegar a tener precios exorbitantes, por lo que podrían poner en graves aprietos tus finanzas personales. Por eso, para que puedas adquirir estos productos tan indispensables sin gastar tanto, te compartimos tres tips que te serán de gran utilidad.
Compra medicamentos genéricos
Estos tienen exactamente los mismos ingredientes activos y efectos terapéuticos que los medicamentos de marca, y pueden costar entre un 30% y un 80% menos.
No esperes a llegar a la farmacia para solicitar un medicamento genérico, puedes decirle a tu médico u otro proveedor de atención médica que prefieres este tipo de medicina antes de que te haga la receta. De esta forma, el doctor podrá recomendarte los que te ahorren más dinero.
Consigue el formulario
Si tienes seguro, la mayoría de los planes de medicamentos actuales tienen formularios, que es una lista de medicinas que está catalogada en diferentes niveles de precio. Por lo general, un producto en un nivel inferior costará menos que uno en un nivel superior.
Para encontrar una copia de esta lista, puedes solicitarla a la compañía que te da el seguro o en su sitio web. Una vez que tengas esa información, puedes compartirla con tu médico para que, en la medida de lo posible y sólo si él lo aprueba, te recete medicinas que estén en los niveles de menor costo.
Paga en efectivo
La mayoría de los medicamentos genéricos cuestan menos si los pagos con dinero contante y sonante en lugar de usar el seguro. Por ejemplo, algunas tiendas como Target o Walmart ofrecen medicinas con descuento que pueden llegar a costarte tan poco como $4 dólares por un suministro de 30 días, y $10 dólares por un suministro de 90 días si pagas en efectivo.
Por otro lado, comprarlo a través de una compañía de seguros, podría requerir que hagas un copago de $10 dólares por ese mismo suministro de 30 días, ¡que sería más del doble!
Las medicinas podrían convertirse en un gasto importante, dependiendo de la enfermedad que padezcas. Por eso, no eches en saco roto estos consejos, pues podría serte de mucha utilidad en algún momento de necesidad.
Te aconsejamos consultar con tu médico personal antes de implementar cualquier cambio en el consumo de tus medicamentos.
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