Se tatuó símbolo nazi; su jefe era judío y lo despidió
El empleado demandó a su patrón al considerar que fue víctima de un acto de discriminación
Un curioso caso de despido laboral ha sido revisado en la Primera Sala de la Suprema Corte de la Justicia de la Nación (SCJN) de México. Un hombre, cuya identidad es desconocida, interpuso una demanda en contra de quien fuera su jefe, al considerar que este lo despidió de su trabajo de manera injustificada.
El hombre sustentó en su demanda haber sido víctima de un acto discriminatorio, ya que alegó que su exjefe lo despidió simplemente por tener un tatuaje.
La ministra Norma Lucía Piña Hernández indicó que, efectivamente, tener tatuajes y exhibirlos es parte de la libertad de expresión y por ende, no debe ser motivo de discriminación en el ámbito laboral.
Sin embargo, en esta historia hay algo más. Resulta que el tatuaje que se hizo esta persona era una cruz esvástica, famoso reconocido símbolo nazi, lo cual su exjefe lo tomó a mal ya que este es judío.
“Si el tatuaje ostentado es una cruz esvástica que en nuestro ámbito cultural representa un discurso de odio racista (antisemita) y se exhibe en el contexto de una empresa privada con finalidad comercial, ante empleados y directivos que se identifican como judíos, ese acto de expresión carece de protección constitucional”, explicó la ministra Piña.
Además, varios trabajadores de la empresa se sintieron violentados por el significado de dicha imagen, por lo que la SCJ consideró que el despido de este trabajador no incurrió en ningún delito de tipo discriminatorio.