Entregan cientos de regalos a niños en proceso de refugio y asilo frente a la oficina del ICE en Miami

Cientos de niños inmigrantes cuyas familias están en proceso de asilo y refugio en Miami recibieron sus regalos de Navidad. El Círculo de Protección de Miramar, que agrupa varias organizaciones pro inmigrantes del sur de la Florida, organizó un evento de entrega y recolección de juguetes para los niños migrantes frente a las oficinas del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos (ICE por sus siglas en inglés).

Las familias que acudieron al edificio federal se encontraron con una grata sorpresa: estaban regalando juguetes para los más pequeños. Un Santa Claus muy latino empezó a entregar los presentes a los niños que, este año, a pesar de su difícil situación, podrán disfrutar de los regalos.

Carlos Naranjo, un activista y miembro de la organización Nueva Mayoría de la Florida, criticó a la administración de Donald Trump por el endurecimiento de las políticas migratorias en Estados Unidos. 

“Son instituciones horribles, maltratan sistemáticamente a las comunidades inmigrantes, comunidades que siempre han sido muy importantes para este país, que son trabajadoras, que ayudan a la economía”, indicó.

Por eso, muchos se acercaron al edificio del ICE, donde cada día se forman largas colas, para apoyar a los niños y a sus familias que están en proceso de asilo y refugio en este país. Es Navidad, así que entregaron comida y muchos juguetes. Quieren dejar claro un mensaje: “Los indocumentados no están solos”.

“Ellos creo que vienen buscando alivio y acá son maltratados, y las puertas se les están cerrando”, criticó María Bilbao, otra activista y una de las impulsores de “United We Dream”, una entidad de ayuda al inmigrante.

Los niños se mostraron felices por sus regalos. El pequeño Iván, un guatemalteco de 7 años de edad, ahora podrá tener a su Snoopy, al que abrazará por las noches cuando tenga miedo y su madre no esté en casa.

“Si es de noche lo voy a abrazar, cuando esté durmiendo y mi mamá esté fuera trabajando“, señalaba el pequeño.

Su padre, Edgar, explicaba que él y su familia están “a la espera” para que un juez determine su caso: “Tenemos un caso de inmigración y la verdad, lo que queremos, es quedarnos en este país y superarnos“, reconocía.

Las organizaciones del sur de la Florida ya han avanzado que van a intensificar las protestas de cara al próximo año, un año clave donde Trump podría ser reelegido como presidente de Estados Unidos. Si eso pasa, dicen, la legislación contra los inmigrantes se podría endurecer.