Brutalidad policial tiene gran impacto en latinos pero no repercusión nacional, reconoce congresista
Julián Castro considera que los ataques de los agentes a la comunidad afroestadounidense gozan de mayor atención mediática
El congresista Joaquín Castro, presidente del Caucus Hispano del Congreso, reconoció que los incidentes de brutalidad policial contra la comunidad latina tienen menor atención nacional que la que sufren los afroamericanos.
En entrevista emitida este domingo por la Radio Pública Nacional (NPR), el congresista por Texas aseguró que los casos de brutalidad policial no se asocian con los hispanos de la misma manera que con los hombres afroamericanos en particular, pero ha sido un “problema real para la comunidad latina en todo el país”.
“Con demasiada frecuencia ha habido racismo y brutalidad sistémicos que las comunidades afroamericanas y latinas han tenido que enfrentar”, afirmó el demócrata.
En su opinión, han muerto personas latinas por esta causa, pero que también hay otras que sufren “daños físicos o emocionales y mentales” que llevan consigo por un largo tiempo.
En los últimos meses se han registrado casos de violencia policial contra latinos pero sin la repercusión de los fallecimientos de afroamericanos como George Floyd, que murió el 25 de mayo cuando estaba bajo custodia policial en Minneapolis (Minnesota), en un suceso que desató protestas por todo el país.
En cambio, la muerte el 21 de abril en similares circunstancias de Carlos Adrián Ingram López, que estuvo detenido boca abajo durante 12 minutos por la policía en Tucson (Arizona) antes de morir en abril pasado, no tuvo similar atención mediática.
Tampoco la de Andrés Guardado, de 18 años y raíces salvadoreñas, quien murió el 18 de junio cuando fue abatido por disparos de la policía al sur de Los Ángeles, lo que generó algunas protestas en la ciudad californiana en demanda de respuestas de las autoridades.
En opinión del presidente del Caucus Hispano, el proyecto de ley aprobado en la Cámara baja y titulado “Ley de justicia en las tácticas policiales” ayudará a la comunidad afroamericana y la latina, pero “también protegerá a todos los estadounidenses, de ser abusados por la policía”.
Esta medida vetaría que los agentes agarren del cuello para dificultar la respiración a las personas que detengan, una maniobra que acabó con la vida de Floyd y que muchos departamentos policiales de EE.UU. ya han vetado pero aún sigue sin regular en parte del país.
Según una investigación del diario Washington Post, los latinos son los segundos que más mueren a manos de la policía, con 23 por millón de habitantes, muy por encima de los blancos (13 por millón) y solo debajo de los afroamericanos (31 por millón).