Administración Trump planea dificultar acceso a visas para trabajadores con alta cualificación
Dos reglas reglas acabarían con un tercio de las solicitudes del visado H-1B, según funcionarios del Gobierno
La Administración Trump publicó este martes dos medidas que reducirían drásticamente las posibilidades de contratar a trabajadores extranjeros altamente cualificados. Las políticas están sujetas a exenciones especiales que permiten eludir la revisión característica de este tipo de normas, según dijeron funcionarios del Gobierno.
Con una de ellas, el Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés) reduciría los tipos de trabajo para los que se puede solicitar visas H-1B de “ocupación especializada”, cambiaría la relación entre el empleado con dicha visa y su empleador y limitaría a un año la validez del visado. La otra, del Departamento de Trabajo, definiría cuántos de esos trabajadores serían asalariados.
La aplicación de estas dos reglas implicaría el rechazo de un tercio de las solicitudes de visa H-1B, según funcionarios del Gobierno dijeron este martes en una llamada de prensa.
“Esta normativa que el departamento publicará esta semana es de lejos una de las reformas más importantes que se ha hecho al programa H-1B en los últimos 20 años”, dijo el subsecretario de Trabajo Patrick Pizzella.
Los cambios, anunciados a menos de un mes de las elecciones presidenciales, forman parte de los intentos del Gobierno del presidente Donald Trump de reducir también la inmigración regularizada.
El secretario interino de DHS, Chad Wolf, defendió en un comunicado que “hemos entrado en una era en la que la seguridad económica es una parte fundamental de la seguridad nacional” y que “debemos asegurarnos de poner a los trabajadores estadounidenses primero“.
Los cambios se basan en la orden ejecutiva que Trump firmó en junio para suspender la emisión de ciertas visas de trabajadores temporales hasta finales de 2020. Lo hizo también con la excusa de priorizar a los trabajadores estadounidenses en un momento de crisis económica derivada del coronavirus.
Sin embargo, reducir la inmigración fue una de sus promesas estrella en la campaña de 2016 y ha sido una de los objetivos en los que su Administración se ha enfocado desde que llegó a la Casa Blanca.
Como muchas de sus otros cambios en esta materia, las reglas que modificarían las visas H1-B enfrentarán probablemente un largo periplo judicial como ya lo hizo la orden ejecutiva de Trump.
Grupos de empresarios alegaron entonces que Estados Unidos se beneficia de la profesionalidad y la experiencia de los trabajadores temporales. El mismo argumento aplicaría para el anunciado recorte de un tercio de los visados de trabajos cualificados.