Las matrículas consulares son identificaciones válidas para vacunarse contra COVID en LA

La matrícula consular, cualquier identificación que tenga foto y nombre y hasta una licencia de manejo de cualquier país aunque esté expirada, puede servir para identificarse a la hora de recibir la vacuna contra COVID-19.

“Las farmacias que han negado las vacunas a inmigrantes, están corrigiendo el proceso de manera interna”, dijo la doctora Eloísa González del Departamento de Salud Pública del Condado de Los Ángeles durante la videoconferencia “Lo que los inmigrantes tienen que saber sobre COVID”, organizada por Ethnic Media Services.

“El  gobierno federal y el condado de Los Ángeles hemos dicho que a nadie se le va a preguntar su estado migratorio para darle una cita o aplicarse la vacuna de COVID. Quiero que esto quede claro porque hemos escuchado que están rechazando a gente por su estado migratorio. Eso no debería estar pasando nunca en nuestro condado”.

La semana pasada, La Opinión documentó el caso de una madre inmigrante a quien la farmacia Rite Aid le negó la vacuna por solo contar con una matrícula consular para identificarse, y la empleada la llamó indocumentada. Al día siguiente, al hacerse pública la controversia, Rite Aid ofreció disculpas a la madre y procedió a aplicarle la vacuna.

Cuestionada sobre la vacuna AstraZeneca, la doctora González dijo que no ha recibido autorización de la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) para que se aplique en Estados Unidos, “Entonces vamos a dar más dosis de Pfizer, Moderna y Johnson & Johnson, y podemos anticipar que aproximadamente para el Primero de Mayo podremos tener vacunas suficientes para cada persona de 16 años y más que quieran o necesiten una vacuna”.

Confió en que la falta de suministro que hemos experimentado, desde que comenzó la vacunación, cambie y se resuelva en menos de un mes.

¿Los adolescentes deben vacunarse?

La doctora González dijo que las personas de 16 años y más de edad, pueden solamente recibir la vacuna Pfizer, mientras que las vacunas Moderna y Johnson & Johnson son para personas mayores de 18 años y mayores.

“En este momento se está trabajando en ensayos clínicos en vacunas para los menores de 15 años”.

Pero por ahora dijo que necesitamos enfocarnos en disminuir el riesgo de exposición.

“Si eres elegible para ser vacunado, vacúnate. La vacuna es segura, gratuita, disponible para todos sin importar el estado migratorio y aunque no tengan seguro de salud”.

Pero también recomendó que mientras no haya una gran cantidad de gente inmune en Los Ángeles, hay que seguir con la mascarilla, la distancia física, evitar los lugares cerrados,  grupos grandes y tratar de  no viajar para limitar las variantes.

Y precisó que a partir de mayo, a cualquier personas se le va a poner la vacuna, sin tener que probar si pertenece a cierto grupo o la edad.

Exámenes de COVID

La doctora Erika Flores Uribe, de medicina de emergencia del Departamento de Servicios de Salud del condado de Los Ángeles, dijo que mientras esperamos más vacunas, es importante recordar que aún con las vacunas, los latinos y afroamericanos continúan siendo los más impactados con los casos positivos y menos tasas de inmunización.

Por lo tanto, observó que la gente debe tomar en cuenta que las pruebas de COVID son gratis, más fáciles que nunca y en algunos lugares pueden llegar sin cita.

“Las pruebas son muy importantes para detener el aumento de casos, y si salen positivos, deben aislarse para evitar la propagación de COVID-19”.

¿Quiénes deben hacerse la prueba? 

Las personas que presenten síntomas u las que han sido expuestas, deben evaluarse y no importa el estatus migratorio.

Moralmente aceptable

Isaac Cuevas, director de Asuntos de Inmigración de la Arquidiócesis de Los Ángeles dijo que como Iglesia han trabajado en las áreas más afectadas por COVID, para explicar que la mejor manera de amar y proteger al prójimo es vacunarse. “El Papa dice que la vacuna es moralmente aceptable, porque ayuda a salvar vidas”.

En las parroquias donde la Arquidiócesis de Los Ángeles mantiene clínicas de vacunación en asociación con el condado, cuentan con voluntarios que ayudan a las personas que no tienen acceso a computadoras o no saben navegar el sistema para que saquen sus citas.

“La demanda es mucho más alta que la oferta, pero estamos listos para asociarnos con organizaciones que puedan darnos vacunas y llevarla a otros vecindarios”.

Hizo ver que tuvieron que entrenar a los pastores y líderes de fe sobre el virus y cómo protegerse, y ahora con la vacuna, animarlos a vacunarse.

“En la comunidad, muchas veces hay miedo y aprehensión para salir a buscar ayuda de los servicios municipales. Como somos una Iglesia nos ven como una fuente de confianza, y ellos nos escuchan”.

El doctor Javier Cajillas de la Universidad del Sur de California (USC) y del Departamento de Salud del Condado fue una de las primeras personas que trabajó con el personal de las parroquias para entrenarlos a nivel emocional y que pudieran ayudar a otras personas cuando los números estaban subiendo.

¿Cómo afectará el estatus?

Daniel Sharp, jefe de la Oficina de Asuntos de Inmigrantes del Condado de Los Ángeles puntualizó que la administración de la vacuna contra COVID, no afectará el estado migratorio ni la elegibilidad para la residencia porque no es considerada como carga pública.

Por otra parte, precisó que la información médica es privada y no es compartida con autoridades de migración.

“Quiero animar a todos a que se vayan a vacunar y recibir todo el cuidado que necesiten”.

Subrayó que la semana pasada, la administración de Biden suspendió la regla de la Carga Pública. “Solo podría impactar a quienes están recibiendo asistencia de dinero en efectivo, pero no a aquellos que reciben cupones de alimentos CalFresh y asistencia para la vivienda”.

Rigo Reyes, director de la Oficina de Asuntos de los Inmigrantes del condado de Los Ángeles pidió no quitar las manos del volante solo porque ya están llegando a casa, en relación a que aún con la vacuna, no podemos cantar victoria ya que hay que seguir las recomendaciones que nos dan los médicos. “Hay que prevenir los fraudes. La vacuna es gratuita, y no tienen que pagarle a nadie”.