Los 25 estados que hasta el momento quitarán los beneficios de desempleo

Desde que inició mayo diversos gobernadores de Estados Unidos dieron a conocer que los beneficios por desempleo federales serían suprimidos de sus entidades argumentando que esto representan un impedimento para que sus ciudadanos regresen al campo laboral.

Estados como Alabama, Arkansas, Arizona, Georgia, Idaho, Iowa, Mississippi, Missouri, Montana, Dakota del Norte, Alaska, Texas Ohio, Carolina del Sur, Dakota del Sur, Tennessee, Utah y Wyoming, ya han suprimido los apoyos por desempleo. Estas entidades son gobernadas por los republicanos.

En contraste, los gobernadores demócratas todavía no están tomando este tipo de medidas, incluso en diversas regiones que administran siguen apoyando a los trabajadores e incluso están promoviendo diversos pagos que les puedan ayudar a enfrentar los estragos que ha dejado la pandemia de la Covid-19.

A pesar de que los beneficios federales tenían fecha de expiración el 6 de septiembre la autonomía que tienen los gobernadores les permite decidir si este apoyo se reparte o no en sus territorios. Estas decisiones han puesto en aprietos a millones de estadounidenses.

Los beneficios federales por desempleo incluyen los pagos suplementarios de $300 por semana para las personas que reciben desempleo estatal, es decir cada beneficiario recibía dicho apoyo además de los $300 dólares que les proporcionaba su entidad, con lo que obtenían $600 dólares.

Aunque los gobernadores avisaron que se cancelarían los pagos federales en mayo, los apoyos no se cortaron de inmediato por la calendarización de reparto ya existente y porque dieron la oportunidad de que los beneficiarios buscaran un empleo antes de que expirara el plazo fijado.

Hay entidades en las que ya no se está repartiendo la ayuda, Alaska, Iowa, Missouri y Mississippi dejaron de repartir el beneficio el 12 de junio. Estos cuatro estados representan el primer grupo de 25 que han anunciado que recortarán los beneficios que expiran en septiembre.

Tras el anuncio de que se recortarían los beneficio federales por desempleo diversos ciudadanos, activistas, así como políticos criticaron de forma directa a los gobernadores republicanos, quienes insisten que los apoyos no ayudan en la generación de empleos.

Ante esta postura, el senador independiente Bernie Sanders externó en un comunicado que “hay una escasez de empleadores dispuestos a pagarles a los trabajadores un salario digno con beneficios decentes. Si los empleadores quieren expandir su fuerza laboral, hay una solución simple: aumentar los salarios”.

El que se corte el apoyo federal significa que los trabajadores únicamente recibirán entre $300 y $350 dólares correspondientes a su estado. Dicho monto, generalmente, equivale a la mitad de su salario previo al despido. De acuerdo con el Departamento de Trabajo el beneficiario promedio recibió $350 a la semana en beneficios estatales.

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