Restaurante de Huntington Beach que recibe a clientes sin vacuna fue beneficiado con fondos del gobierno
Programa de Protección de Cheques de Pago giró recursos por más de $57,000 en favor de Basilico's; las autoridades han multado por más de $150,000 al negocio
El restaurante Basilico’s Pasta e Vino de Huntington Beach, que publicó anuncios afuera de su local en los que aceptaba clientes que demostrara que no habían sido vacunados contra el COVID-19, recibió dinero del Programa de Protección de Cheques de Pago del gobierno.
Los fondos que recibió dicho negocio por parte de dicho programa ascienden a $57,738, de acuerdo con la base de datos de la Administración de Pequeñas Empresas de ProPublica.
Estos recursos del gobierno federal se ofrecieron como asistencia a las pequeñas empresas para sortear los costos de nómina debido a la crisis económica que dejó la pandemia de coronavirus.
La actitud del restaurante, cuyo dueño es Tony Roman, fue recibida con severas críticas por parte de la comunidad del condado de Orange.
Huntington Beach CA restaurant, Basilico’s Pasta e Vino, says it’s having fun watching ‘heads explode’ over mandatory no-vax policy. pic.twitter.com/thbOwAYW4m
— Lowkey Rey 2.0 (@AtlRey) July 27, 2021
Desde mayo de 2020, el restaurante de Huntington Beach hizo a un lado las medidas solicitadas por las autoridades de salud para evitar los contagios por COVID-19, sobre todo al uso de mascarillas faciales.
En contra de la vacuna contra COVID-19
Esta semana, afuera de las instalaciones de Basilico’s se colocaron volantes con la leyenda: “Aviso, Se requiere prueba de no estar vacunado. Tenemos tolerancia cero para la estupidez traidora y antiamericana. Gracias por reflexionar”.
En respuesta al Southern California News Group, Román escribió que era una prueba de coeficiente intelectual.
“Si la gente está tan cegada por su rabia que no pueden leer entre las líneas del letrero, entonces nuestro próximo letrero debería decir ‘Eres demasiado estúpido para entrar'”, expresó el dueño de Basilico’s.
Las autoridades del estado han presentado múltiples citatorios por infracciones, como no seguir un programa de capacitación para sus empleados con el propósito de prevenir el coronavirus, o por no proporcionar cubrebocas a sus trabajadores.
El restaurante recibió una multa por $152,060, sanción que no ha sido pagada ni apelada.