Ibrahim, hermano de Osama bin Laden, vende su mansión abandonada de Bel-Air
La propiedad construida en 1931 en Bel-Air, California y que no ha sido habitada desde los atentados del 11 de septiembre de 2001, está en búsqueda de nuevos dueños
Ibrahim bin Laden, medio hermano del fallecido terrorista yihadista Osama bin Laden, decidió poner a la venta la imponente mansión que tiene en el área de Bel-Air, en California.
El inmueble, por el que pagó cerca de $2 millones de dólares en 1983 y fue construido en el año de 1931, no ha sido habitado desde los ataques del 11 de septiembre del 2001, pues Ibrahim temía ser detenido por su relación sanguínea con el líder de Al-Qaeda, por lo que aprovechó que se encontraba fuera del país para ya no volver.
De acuerdo a la ficha técnica, dada a conocer por diversos medios especializados en la venta de bienes raíces, la residencia de estilo Mediterráneo cuenta con 7,106 pies cuadrados, con siete recámaras y con cinco baños.
También goza, en su lote de 2.16 acres de extensión, de extensas áreas verdes, de piscina con sus respectiva área de spa y de un jacuzzi.
A pesar de que nadie ha vivido ahí en casi 20 años, la casa ha servido de set de filmación de diversas películas, incluidas las de corte pornográfico, lo que ha ayudado en algo a su conservación.
Debido al abandono, algunos rinconcitos ya se ven un tanto deteriorados y la maleza crecida, por lo que el nuevo propietario tendrá que invertir una cifra considerable de dinero para dejarla reluciente; sin embargo, también existe la posibilidad de que sea comprada con el propósito de demolerla.
“Hoy, las fotos revelan que la finca ha entrado en un lamentable estado de abandono y deterioro”, informó el portal Dirt sobre la casa que destaca por su fachada magenta y sus techos de teja roja.
Además de llamar la atención por sus dimensiones y su arquitectura, la mansión también lo hace por ser vecina de las propiedades que poseen el empresario israelí Ben Alegem y Jeffrey Kaplan, el magnate de las casas móviles.
La casa está siendo ofrecida por $28 millones de dólares, una cifra que muy pocos pueden dar el lujo de pagar, por lo que habrá que estar atentos si se mantiene su precio o si de rebaja para buscar atraer la atención de posibles inversionistas.
La vivienda fue habitada por Ibrahim y su entonces esposa, Sinai, desde que la compraron hasta principios de la década de los 90, siendo su separación la causante de que ella se fuera en búsqueda de una nueva morada.
Antes de ser habitada por él, la mansión fue hogar de Arthur Freed, un reconocido productor de cine de la Época de Oro de Hollywood.
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