10 mandamientos para cocinar la pasta perfecta
Te compartimos los 10 consejos básicos a seguir para obtener una pasta perfecta; porque no se trata solo de evitar los pecados capitales al cocinarla, como no agregar sal o romper los fideos
La pasta es perfecta para cocinar algo delicioso y en poco tiempo. Tiene una preparación muy sencilla, es rápida y versátil. Podría decirse que para cocinarla básicamente solo necesitas hervir agua. Pero seguir estos pasos básicos te ayudará a obtener una pasta perfecta.
1. Usa olla amplia y suficiente agua
Una olla amplia y suficiente agua permitirán que tu pasta se cocine mejor y tenga suficiente espacio para expandirse. Suficiente agua ayuda a equilibrar el calor una vez que se agrega la pasta, lo que permite que vuelva a hervir rápidamente. Usa de 4 a 6 litros de agua por cada libra de pasta.
2. Sal al agua de cocción
No te olvides de agregar sal al agua de cocción cuando está hirviendo, antes de agregar la pasta. Este paso es especialmente importante, a menos que quieras una pasta con sabor insípido. No sales demasiado, la pasta debe tener un sabor agradablemente salado, prueba durante el proceso de cocción para ver si está lista, si requiere más sal, añade un poco más.
Las cantidades de sal varían según el tipo. Probando encontrarás tu medida idónea. The Kitchn sugiere una cucharada por 4 litros de agua y 1 libra de pasta.
3. Agrega la pasta al agua hirviendo
Agregar la pasta antes de que hierva el agua ocasionara que la pasta tarde más en cocinarse y que se vuelvan blandos.
4. No rompas los fideos
Romper la pasta es un pecado capital. Coloca un extremo de la pasta en el agua hirviendo y mientras se ablandan, sumerge los fideos suavemente.
5. No agregues aceite de oliva al agua
Algunas personas creen que agregar aceite de oliva al agua evitará que la pasta se pegue. Pero esto resulta inconveniente, agregar aceite de oliva al agua de cocción ocasionará que la salsa no abrace a la pasta como debería y se deslice de los fideos.
6. Revuelve
Para evitar que la pasta se pegue, revuélvela bien en cuanto la incorpores al agua y nuevamente de vez en cuando durante el proceso de cocción.
7. Cocina al dente
Una pasta al dente tiene una textura que no es blanda ni gomosa, debe ser tierna pero firme al morder. La cantidad de minutos que se requieren de cocción dependen del tipo de pasta y de las marcas. Las pastas más pequeñas y delgadas requieren menos tiempo que las formas grandes y densas.
Pocos minutos antes del proceso de cocción recomendado en la caja, prueba la pasta para saber si está lista o falta muy poco. El tiempo puede ser menor al indicado y considera que puede seguirse cocinando con la salsa.
8. Guarda un poco de agua de cocción
A medida que la pasta se cocina, libera almidón. Antes de escurrir la pasta, reserva una taza de agua de cocción, es un espesante perfecto para la salsa. También ayuda a que la salsa y la pasta se peguen.
Usa unas cucharadas de agua con almidón en tu salsa y revuelve vigorosamente hasta que se vuelva brillante y ligeramente espesa.
9. Escurre y no dejes que se asiente
Tras escurrir la pasta no dejes que la pasta se asiente y se seque. A medida que la pasta se enfría, los almidones se endurecerán y se pegará. En lugar de escurrir con un colador, también puedes usar pinzas o cuchara ranurada para transferir la pasta del agua a la salsa.
10. Pasta en la salsa en el mejor momento
Ten lista la salsa antes de cocinar tu pasta. Mantén la salsa caliente en una cacerola grande y ancha para agregar la pasta en ella inmediatamente después de drenarla. Cocinarlas juntas durante uno o dos minutos procura que la pasta absorba mejor el sabor.
Así que ya lo sabes, no te olvides de sazonar, revolver, no agregar aceite, reservar agua para la salsa, cocinar al dente y verterla sobre tu salsa inmediatamente.
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