Licencia de conducir en Estados Unidos: cómo solicitarla por primera vez en California
Como en todos los lugares de Estados Unidos, conducir legalmente en California implica el uso de una licencia de conducir válida en el estado que solo puede ser otorgada por el DMV
Para poder conducir legalmente en California, los residentes deben obtener una licencia de conducir. Crédito: Andrea Piacquadio | Pexels
Cuando un conductor adulto ha completado su tiempo de aprendizaje con un permiso válido en California —el mismo permiso de aprendiz que se concede a los menores inexpertos— el Departamento de Vehículos Motorizados (DMV) lo considerará elegible para obtener una licencia de conducir estándar sin restricciones. En el estado, este proceso de solicitud se lleva a cabo siguiendo algunos pasos sencillos:
1. Visitar una oficina local del DMV de California.
2. Completar un formulario de solicitud de licencia de conducir o tarjeta de identificación propio del estado.
3. Proporcionar pruebas de: identidad, número de Seguro Social y residencia dentro del estado.
4. Pagar la tarifa correspondiente.
Luego de eso, el DMV programará la fecha para que el solicitante presente el examen escrito, una prueba de conocimientos, basada en el manual del conductor del estado, que contiene preguntas relacionadas con las leyes que entran en juego mientras una persona conduce en California. Una vez aprobado este examen, el DMV programa una prueba práctica o examen de manejo, durante la cual el solicitante debe demostrar todas las habilidades que adquirió como aprendiz ante un evaluador autorizado. Una vez apruebe el examen de manejo, el solicitante recibirá una licencia de conducir.
Este tipo de solicitud también aplica para aquellos conductores que provienen de otros estados y se han mudado recientemente a California. El DMV les concede un plazo de 10 días para que lleven a cabo el trámite de solicitud de una licencia válida en el estado, ya que se considerará ilegal si conducen con una licencia válida en el estado de donde provienen.
A pesar de no poseer pruebas de presencia legal o número de Seguro Social, los inmigrantes indocumentados pueden obtener licencias de conducir en California gracias a la Ley AB 60, la cual entró en vigencia desde 2015. Aunque no pueden considerarse una forma de identificación, las licencias de conducir AB 60 cuentan con toda la legalidad propia de las licencias estándar y le permiten a sus portadores hacer uso de sus privilegios en todo el estado sin correr riesgo de discriminación o deportación.
En el caso de las licencias de conducir AB 60, el proceso de solicitud es diferente e implica no solo algunas pruebas de identidad, como el pasaporte válido en el país de origen, sino también pruebas de que el solicitante reside en el estado de California.
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