El incendio forestal Dixie quedó totalmente apagado en el norte de California
Las llamas del incendio Dixie, que quemó cerca de un millón de acres durante más de 100 días, fue extinguido por completo; fue el segundo incendio más grande en la historia de California
El condado de Butte ha pasado por muchos incendios y ahora alta tasa de infecciones por covid debido a la resistencia a la vacuna. (Getty Images) Crédito: PATRICK T. FALLON/AFP | Getty Images
Después de quemar 963,309 acres durante más de 100 días, este domingo fue extinguido al 100% el incendio Dixie, el segundo incendio forestal más grande en la historia de California.
Las autoridades informaron que el fuego fue contenido en su totalidad aproximadamente a las 6 p.m. del domingo.
El incendio Dixie comenzó el 13 de julio en la base del cañón del río Feather y ardió en el Bosque Nacional Plumas, el Bosque Nacional Lassen, el Parque Nacional Volcánico Lassen y en cinco condados: Butte, Lassen, Plumas, Shasta y Tehama.
El Bosque Nacional Plumas confirmó la extinción completa de Dixie.
Los equipos de bomberos pudieron controlar las llamas beneficiados también por la presencia de una histórica tormenta en el norte de California.
El sábado, los bomberos y trabajadores del parque Lassen lograron un avance significativo en la labor de reparación de la extinción del incendio, incluida la tala de árboles, la eliminación de arbolado en el área de Canyon Damn y el trabajo de nivelación de carreteras en varias zonas.
Quedan trabajos por hacer
Todavía quedaban asignadas al siniestro 725 personas, muchos de ellos todavía permanecen acampados en el recinto ferial del condado de Plumas, aunque el gerente del lugar, John Steffanic, indicó que estaba programado su salida a partir de la próxima semana.
El incendio Dixie destruyó al menos 1,300 estructuras y el fallecimiento de un asistente del operador de camiones de bomberos del Bosque Nacional Lassen.
Las tripulaciones no pudieron realizar trabajos de restauración por la lluvia y las condiciones peligrosas. En la región, la precipitación varió de 4 a 12 pulgadas en la zona este del incendio, y de 2 a 5 pulgadas en la zona oeste. En ambas partes ocurrieron nevadas en las elevaciones más altas.
A medida de que mejore el tiempo, los bomberos reanudarán el trabajo donde se considere seguro. La labor de secado se reanudó este martes y las cuadrillas esperan que en los próximos 8 a 10 días les permitan hacer un progreso significativo en el trabajo de restauración de alta prioridad.
Sin embargo, las zonas calcinadas que dejó el incendio Dixie serán ahora otra amenaza para los residentes debido al riesgo de deslaves e inundaciones por las fuertes lluvias.
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