Biden elogia el proyecto de ley de Infraestructura como un “paso monumental hacia adelante”

Después de meses de tensas negociaciones, la Cámara de Representantes aprobó el viernes un proyecto de ley de infraestructura bipartidista, cumpliendo así con una prioridad importante para la agenda interna del presidente Joe Biden y cimentando una victoria política para los demócratas.

Biden dijo el sábado que la votación es un paso “monumental” y que firmaría el proyecto de ley de infraestructura la próxima semana en una ceremonia a la que invitará a los legisladores demócratas y republicanos que votaron a favor..

“Hicimos algo que estaba pendiente desde hace mucho tiempo, de lo que se ha hablado durante mucho tiempo en Washington, pero que en realidad nunca se ha hecho”, dijo, bromeando que la semana de la infraestructura finalmente se cumplió. La ley incluye importantes inversiones en carreteras, puentes, ferrocarriles e internet de banda ancha.

Biden afirmó que ese tipo de leyes solo se ven “una vez en una generación” y prometió que será de gran ayuda para la clase media.

Tras una jornada llena de tira y afloja, la mayor parte de los progresistas accedió a aprobar el plan de infraestructura a cambio de que los centristas se comprometieran a votar antes del 15 de noviembre el plan de gasto social de Biden.

El propio mandatario dijo este sábado que tiene “confianza” en que el proyecto de ley de gasto social acabará aprobándose, aunque no dio una fecha y tampoco se atrevió a aventurar que contendrá ese paquete.

Biden necesitaba una victoria esta semana después del descalabro electoral demócrata en las elecciones del pasado martes, donde perdieron la gobernación de Virginia.

Preguntado al respecto, Biden reconoció que los resultados electorales empujaron a los demócratas a actuar, ya que los votantes enviaron un mensaje muy claro: “Hagan algo, es hora de hacer algo, dejen de hablar y hagan algo”, dijo el mandatario.

La ley de infraestructuras aprobada anoche está valorada en $1.2 billones de dólares, pero solo contempla unos $550,000 millones de dólares en gasto nuevo y es sustancialmente menor al paquete inicial de $2.25 billones de dólares presentado por el presidente en marzo.

Aún así supone una de las inversiones más significativas en la infraestructura del país desde la conocida como Gran Recesión de 2008. 

Biden también abordó su agenda Build Back Better y predijo que el proyecto de ley de gasto social, que también ha sido muy debatido entre los legisladores, pasará por la Cámara y el Senado. Pero reconoció que el “resultado probable” es que el Senado apruebe el proyecto de ley únicamente con los votos demócratas y que lograr que todo el partido participe será “un proceso”.

Con información de EFE y NPR