Andrés Lillini anima a los fanáticos de Pumas: “Nada está perdido con nosotros hasta el último minuto”
Andrés Lillini, entrenador de Pumas, animó a los fanáticos universitarios tras perder la ventaja en el último minuto ante el Seattle Sounders en el partido de ida de la final de la Concachampions
Lillini aseguró que Pumas irá a ganar a Seattle. Crédito: Rafael Vadillo | Imago7
El argentino Andrés Lillini, entrenador de los Pumas UNAM, aseguró que, aunque su equipo empató en casa con el Seattle en el duelo de ida de la final de la Liga de Campeones de la Concacaf, luchará hasta el último momento por el título.
“Nada está perdido con nosotros hasta el último minuto; a los aficionados que no pierdan la esperanza en los jugadores porque el esfuerzo va a ser máximo y le vamos a dar lo que están esperando“, señaló, al referirse al duelo decisivo de la serie, el próximo miércoles en la casa de los estadounidenses.
Los Pumas dejaron ir una ventaja de 2-0 lograda con anotaciones del argentino Juan Ignacio Dinenno. En el segundo tiempo el uruguayo Nicolás Lodeiro anotó dos penaltis y malogró la victoria de los mexicanos.
Lillini sugirió que la primera pena máxima cobrada por Lodeiro fue ilegal porque hubo una falta sobre uno de sus jugadores, sin embargo reconoció fallos en el funcionamiento de su equipo, que no supo conservar la ventaja.
“Cuando nos pusimos 2-0 no tuvimos capacidad de mantenernos lejos de nuestra portería y jugar más en campo rival, hay tristeza y amargura. Vamos a una cancha complicada ante un rival difícil y ojalá el arbitraje sea neutral”, indicó.
En los cuartos de finales los Pumas golearon por 3-0 al New England Revolution después de haber perdido por el mismo margen en casa del rival y en la semifinal dejaron a cero al Cruz Azul, en dos demostraciones de carácter, pero ahora deberán ganar en casa ajena ante un contrario con tres triunfos en tres salidas en su estadio, con 11 goles a favor y uno en contra.
“Siempre nos gusta echarle un poco de sudor y lágrima a esto, así que vamos a Seattle a ganar. No podemos poner excusas, es una final; estamos a 90 minutos de levantar la copa”, agregó.
Lillini reconoció que el del miércoles próximo será el partido más importante desde que tomó las riendas de los Pumas porque su equipo estará obligado a vencer ante un contrario difícil con 70.000 hinchas en contra, sin embargo mostró optimismo.
“Si ellos vinieron y empataron, nosotros podemos ir allá y ganar“, concluyó el estratega argentino. Hay esperanza en Pumas.
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