Por medio de amenazas, “El Chueco” controlaba la venta de cerveza en la sierra de Chihuahua
Los sicarios de José Noriel Portillo les dejaban un número telefónico a los dueños de negocios, al que tenían que marcar para pedir el producto si no querían tener problemas
Al parecer el producto estaba marcado y hasta identificado por números de serie, a fin de que sólo se vendiera su cerveza. Crédito: Hector Vivas | Getty Images
Ya ha pasado más de un mes del asesinato de dos sacerdotes jesuitas a manos de José Noriel Portillo, alias “El Chueco”, identificado como líder del grupo criminal denominado Gente Nueva, adherido al Cártel de Sinaloa.
Y aunque las autoridades mexicanas realizan una intensa búsqueda de este delincuente en la región de la sierra Tarahumara de Chihuahua, hasta el momento no han podido dar con su paradero, pese a que existe una recompensa por información que ayude a su captura.
Sin embargo, durante este tiempo se han dado a conocer detalles del poder que “El Chueco” tenía en esa zona, y ahora se sabe que, incluso, controlaba la venta clandestina de cerveza en varias comunidades.
De acuerdo con autoridades del estado de Chihuahua, Noriel Portillo ocultaba la cerveza en inmuebles que utilizaba como bodegas en la comunidad de Bahuichivo.
Para tener pleno control de este negocio, el grupo criminal bajo su mando amedrentaba a los dueños de pequeños locales de venta de cerveza, diciéndoles que el producto estaba marcado y hasta identificado por números de serie, a fin de que sólo se vendiera su cerveza.
Tras darse a conocer esta información, el diario Milenio contactó a algunos dueños de pequeñas tiendas en la zona para conocer su versión, los cuales aseguraron que los sicarios del “Chueco” les dejaban un número telefónico al que tenían que marcar, para pedir las charolas de cerveza que se requirieran y las dejaban hasta el negocio.
Sin embargo, varios de ellos dejaron de vender el producto, ante el excesivo precio que los delincuentes cobraban por cada charola de cerveza. “Si la comprabas en otro lado había problemas con ellos, estaba prohibido”, relató uno de los entrevistados.
Durante los operativos que elementos del Ejército, la Guardia Nacional y la Policía estatal realizan en la región, se logró asegurar una bodega en el municipio de Urique, en donde hallaron más de 2,000 charolas con cerveza, las cuales contenían más de 49,500 latas.
Las investigaciones revelaron que “El Chueco” comenzó a vender clandestinamente cerveza en las comunidades de la sierra Tarahumara desde hace dos años. Las latas las traía desde el municipio de Navojoa, Sonora, y recorría más de 250 kilómetros y unas ocho horas para resguardar las charolas en distintos inmuebles de Bahuichivo.
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