Advierten que cárteles mexicanos quieren el control directo del narco en Colombia

Los cárteles del narcotráfico en México no solamente mantienen una lucha por el control del territorio nacional, sino que, además, desean extender este control hasta Colombia, en donde se origina la mayor parte de la producción de la droga que ingresa a Estados Unidos.

El general Fernando Murillo, director de Investigación Criminal de la policía de Colombia, reveló este fenómeno al señalar que, en lo que va del año, 23 mexicanos vinculados con el narcotráfico han sido detenidos en su país.

En este caso, el Cártel de Sinaloa y el Cártel Jalisco Nueva Generación, son las dos organizaciones criminales que pelean por la hegemonía en Colombia, ya que, tras la captura de Dairo Antonio Úsuga David, alias “Otoniel”, jefe del Clan del Golfo, ambos grupos intensificaron el envío de “emisarios”.

Durante una entrevista con el semanario Proceso, Murillo aseguró que estas personas, más que viajar para hacer negociaciones con grupos locales, buscan tener el control directo del tráfico de drogas, y de esta manera acrecentar ganancias.

De acuerdo con el funcionario, cada año se comercializan unas 200 toneladas de cocaína colombiana con valor de 5,000 millones de dólares en el mercado estadounidense.

“Cuando capturamos a cabecillas del Clan del Golfo, los cárteles de Sinaloa y Jalisco Nueva Generación tienen que volver a buscar aliados que les puedan generar las toneladas de droga que requieren y, además, que les garanticen lo que más buscan: que realmente sea una droga de calidad”, dijo Murillo.

Un ejemplo es la captura de “Otoniel”, lo que afectó el suministro de droga de los cárteles mexicanos, que tenían una “relación comercial muy cercana” con el que era considerado el principal capo colombiano.

“Lo que hemos visto es que los cárteles mexicanos están mandando enviados de confianza, de mucha confianza, que supervisan desde la producción hasta el transporte y la entrega de la droga”, afirmó el general.

Con esa modalidad, los narcotraficantes mexicanos “buscan el control de todos los eslabones de la cadena del narcotráfico” en Colombia, desde los sembradíos de hoja de coca hasta su transformación en cocaína, y su salida al exterior a través de rutas marítimas y aéreas.

Un hecho revelador, señaló Murillo, fue la captura, el pasado 19 de mayo, de seis ciudadanos mexicanos en aguas internacionales del Pacífico, quienes transportaban 699 kilos de cocaína en una lancha rápida, cuando ese tipo de cargamentos son transportados por lo general por colombianos.

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