¿La estatua? Jugador “inventa” nueva forma de cobrar un penal, aunque no siempre funciona
Jardel, jugador del Feirense de Portugal, llamó la atención en diversas partes del mundo por lo curioso de su técnica para cobrar penales
Imagen de referencia de un gol de penalty. Crédito: Getty Images
Esmiraldo Sá da Silva, mejor conocido como Jardel, el futbolista del Feirense, equipo que compite en la segunda división de Portugal, se convirtió en tendencia en redes sociales, debido a que cobró, no sólo uno, sino dos penaltis con una técnica insólita que causó asombro en todo el mundo.
El primer video que se volvió viral muestra al jugador parado frente al balón en el manchón penal. En cuanto el árbitro pita para avalar el cobro, el jugador levanta el pie derecho y se queda congelado como estatua durante ocho segundos, mientras el silbante se muestra atento y hay algunos empujones entre los jugadores afuera del área.
Instantes después, de un momento a otro patea el balón hacia su derecha y, aunque el portero adivina la trayectoria del balón, el rápido movimiento del cobrador le impide llegar a tiempo para detenerlo.
La curiosa técnica causó sorpresa en distintas partes del mundo y desató reacciones en Internet con comentarios como “Definitivamente, uno de los penaltis más extraños que jamás verás“, “¿Por qué parece que el video está en pausa, a excepción del número 9 y el jugador rival?”, entre muchos otros que aparecieron en redes sociales.
Con el gol, el partido entre el Feirense y el Leixoes se empataba de manera momentánea 1-1, pero habría más historia y nuevamente aparecería Jardel para dar de qué hablar, ya que en tiempo de compensación del encuentro, otro penal fue marcado a favor al equipo local y el elegido para tirarlo fue el autor del primer tanto, quien se posicionó en el manchón penal de la misma forma en que lo hizo minutos antes, se quedó congelado con la pierna arriba y disparó, pero con un final distinto, ya que el esférico rebotó en las manos del arquero, quien se recostó de nuevo sobre su lado derecho y esta vez sí alcanzó el balón.
Quizá el fallo se dio porque esta vez Jardel esperó 10 segundos, en lugar de 8, o tal vez porque ya estaba cansado y no pudo disparar con la misma potencia que en la primera ocasión, pero lo cierto es que el tanto inicial fue visto como algo asombroso y el segundo como una pifia garrafal, ya que, además de todo, era el penal que les hubiera dado el triunfo al minuto 96.
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