Familia latina que lo perdió todo en un incendio recibe una vivienda
Después de un mes, finalmente la pareja Benítez con sus dos hijos se mudaron recientemente a una vivienda en Alhambra
Gabriel y Elitania Benítez estaban muy agradecidos con las organizaciones y personas que los ayudaron. (Jacqueline García/La Opinión) Crédito: Jacqueline García/La Opinión) | Impremedia
El miércoles por la mañana la señora Elitania Benítez lavaba sus verduras para hacer la comida del día. Su cocina con el frutero, un tortillero, la licuadora y un horno para calentar la comida mostraban ese ambiente hogareño y acogedor de una familia latina.
En la sala, el señor Gabriel Benítez jugaba con sus dos perritos mientras que el gato descansaba del calor en el piso de la sala.
La pareja instalada en su nuevo hogar en la ciudad de Alhambra, dijo que estaba muy agradecida con la comunidad y un sinfín de organizaciones y otras entidades que les tendieron la mano después de haber perdido todo hace poco más de un mes.
La madrugada del 19 de julio, el apartamento donde vivían en Lincoln Heights se incendió por completo y los cuatro miembros de la familia salieron huyendo solo con lo que tenían puesto. El señor Gabriel trató de salvar a sus dos perritos, y en el intento se lastimó los pies con los vidrios rotos y al ingerir altas cantidades de humo.
Al siguiente día, desconcertados y sin saber qué hacer intentaron hablar con la dueña del complejo habitacional. Su respuesta fue que les devolvería los $600 que dieron de depósito hace más de 19 años y que el contrato de inquilinos estaba terminado.
La familia se instaló por una semana en el estacionamiento del complejo habitacional esperando que hubiera una respuesta más razonable por parte de la dueña, pero esto no sucedió.
Eventualmente con la ayuda de la comunidad se mudaron a un hotel donde vivieron por cerca de un mes, sin embargo, La situación no era para nada fácil, contó Gabriel.
“Comprábamos comida todos los días porque el cuarto no tenía cocina y era un gasto de $150 o $200. Eso era mucho”, dijo Gabriel.
La familia buscó otras viviendas para reubicarse pero les fue imposible, en el apartamento de Lincoln Heights la familia pagaba poco más de $900 de alquiler, pero los apartamentos que buscaban similares costaban casi el doble. El señor Gabriel es el único sostén de la familia y en ocasiones el trabajo no le llega como cargador de mudanzas.
Solución temporal
Gabriel Benítez Jr., de 17 años e hijo mayor de la familia, luego del incendio, recibió de Cal States Los Ángeles un dormitorio para hospedarse. Este movimiento fue inesperado e invaluable para el joven ya que usualmente el proceso toma meses y en ocasiones muchos estudiantes se quedan esperando un dormitorio.
Para su buena suerte de la familia, el martes 23 de agosto ellos fueron llevados a su nuevo hogar en la ciudad de Alhambra.
“No lo creíamos cuando llegamos. Está muy bonita la casa”, dijo Elitania Benítez, matriarca de la familia. “No la habíamos visto antes, solo llenamos papeleo y luego nos dijeron que ya estaba disponible”.
La casa cuenta con dos recámaras, un baño, cocina, un pequeño cuarto con lavadora y un patio donde pueden correr las dos mascotas de los Benítez.
Además, el inmueble tiene incluidas dos camas para los muchachos, un comedor de cuatro sillas, un sillón para la sala, una cama para la pareja, así como el refrigerador, estufa y lavadora.
Debido a que los Benítez tienen a sus dos hijos menores de edad, también se les asignó una trabajadora social para procurar el bienestar de los menores. El hogar donde han sido instalados estará disponible para ellos por un periodo de un año y pagarán de renta una cantidad ajustada de acuerdo al ingreso del señor Gabriel quien trabaja en una compañía de mudanzas.
Elitania dijo que cuando su hija María Cristina de 14 años vio la casa por primera vez no pudo evitar las lágrimas. Por primera vez tiene una recámara la cual compartirá con su hermano cuando llegue en sus días libres de la universidad.
Gabriel dijo que tanto la universidad de Gabriel Jr. como la escuela de María Cristina están relativamente cerca, lo cual es de gran beneficio para la familia.
La pareja desconoce qué pasará después de que culmine el año de vivienda temporal en la casa que se les ha otorgado, pero por ahora disfrutan su nuevo hogar. Ambos recalcaron que su vivienda no hubiera sido posible sin la ayuda de la comunidad y desconocidos que les brindaron apoyo desde el momento que se incendió su hogar.
“Como me dijo un representante de una de las organizaciones, ‘con fe y paciencia todo se llevará a cabo’”, recalcó Elitana.
