Illinois decreta emergencia por autobuses de inmigrantes enviados desde Texas

El gobernador J.B. Pritzker firmó una declaración de emergencia por desastre y movilizó a 75 miembros de la Guardia Natural de Illinois el miércoles para atender a los más de 500 inmigrantes indocumentados que fueron transportados en autobuses a Chicago por el gobernador de Texas Greg Abbott.

La declaración de desastre permitirá que la Agencia de Manejo de Emergencias (FEMA) de Illinois, así como los funcionarios de los condados de Chicago y Cook, brinden transporte, vivienda, alimentos, exámenes de salud y tratamiento médico a los inmigrantes.

“Permítanme ser claro: mientras que otros estados pueden tratar a las personas como peones, aquí en Illinois estamos tratando a las personas como personas. Cuando alguien venga corriendo y buscando ayuda, haremos lo correcto y le ofreceremos una mano.”, resaltó este miércoles el gobernador demócrata en una conferencia de prensa.

Desde el pasado 1 de septiembre el gobernador de Texas, el republicano Greg Abbott, incluyó a Chicago en su lista de destinos para enviar a inmigrantes que fueron liberados por las autoridades migratorias en la frontera sur del estado.

Pritzker dijo que desde esa fecha más de 500 migrantes han llegado al estado y más vienen en camino. Pritzker resaltó que el gobernador Abbott ha decidió no informar cuando envía autobuses de familias migrantes y que en Illinois no saben cuantos de ellos son niños ni cuales serán sus necesidades cuando lleguen a ese estado.

“Aquí en Illinois, nos negamos a rebajarnos al nivel de ese hombre. Proporcionaremos alimentos, refugio y atención médica a los niños, mujeres y hombres que lo necesiten”, afirmó Pritzker.

El gobernador explicó que a diferencia de cuando el estado recibió a los refugiados afganos, la llegada de estos inmigrantes se da sin previo aviso, y las autoridades estatales y locales apenas cuentan con tres o cuatro horas para brindar asistencia.

La alcaldesa de Chicago Lori Lightfoot dijo que era “correcto y justo” que los alcaldes de los suburbios y los presidentes de los vecindarios recibieran un aviso por adelantado de que los inmigrantes están siendo enviados a sus ciudades, y dijo que se han producido “buenas conversaciones” en los últimos días.

Lightfoot dijo que no creía que muchos de los inmigrantes quisieran venir a Chicago.

“Ningún ser humano, especialmente aquellos que buscan asilo y huyen de situaciones peligrosas, deben ser tratados como un peón en un momento en que son más vulnerables”, dijo Sean R. McDermott, alcalde de la ciudad de Countryside.

Los funcionarios encargados de hacer cumplir la ley de Illinois están examinando si los inmigrantes “se subieron voluntariamente a estos autobuses, sabían a dónde iban o si les dieron la información adecuada”, dijo Pritzker.

La proclamación de emergencia permite que el estado brinde apoyo logístico a medida que los migrantes continúan llegando diariamente, según la oficina del gobernador.

“Todo esto es un juego político para el gobernador Abbott y, francamente, es cruel”, dijo el demócrata.

Miles de inmigrantes han sido enviados en las últimas semanas por el gobernador Abbott desde Texas a la ciudad de Nueva York, a Chicago y Washington, D.C.

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