Miguel Ángel Félix Gallardo acusa tortura psicológica en prisión al comer y dormir poco
Desde el pasado 7 de septiembre un juez le concedió a Miguel Ángel Félix Gallardo la medida de prisión domiciliaria, pero hasta el momento no se ha ejecutado y permanece en la cárcel
A Félix Gallardo también se le vinculó con el asesinato del agente de la DEA Enrique Camarena Salazar, pero está pendiente la resolución sobre su participación. Crédito: Milenio | Cortesía
En medio de la batalla legal que emprendió Miguel Ángel Félix Gallardo por obtener la prisión domiciliaria, que presuntamente le será concedida en unos días, la defensa del narcotraficante presentó una demanda de amparo al argumentar que su cliente sufre de tortura psicológica.
Al respecto el exlíder del Cártel de Guadalajara manifestó: “he comido poco, dormido poco y traigo la presión alta”, por lo que el juez encargado del caso señaló que se atenderán las manifestaciones del quejoso, a fin de que las autoridades penitenciarias preserven su integridad y salud.
La doctora María Teresa Vallejo Pérez, abogada de Félix Gallardo, ya había adelantado que presentaría dicha demanda luego de que el pasado jueves 15 de septiembre no se ejecutó el traslado del llamado “Jefe de jefes” a su domicilio.
De acuerdo con lo señalado por la defensa, ese día, y después de que se realizaran todos los trámites para el traslado, la Guardia Nacional solicitó una prórroga porque no disponía de la logística necesaria para cumplir la disposición judicial.
Esa eventualidad, según declaró Vallejo Pérez, representa tortura psicológica para su cliente, quien deberá esperar unos días más para ser llevado a un domicilio particular para cumplir el resto de su condena.
Cabe recordar que fue el pasado 7 de septiembre cuando un juez le concedió a Félix Gallardo la sustitución de la pena de 40 años de prisión, a cambio de la medida de seguridad de confinamiento (resguardo domiciliario) con monitoreo electrónico por medio de un brazalete con geolocalizador, pero hasta el momento este fallo no se ha ejecutado.
El argumento del juez que concedió la prisión domiciliaria a Félix Gallardo, es que el fundador del Cártel de Guadalajara tiene 76 años y presenta un deteriorado estado de salud, pues no puede caminar bien y sufre los estragos de la neumonía, por lo que tiene que estar conectado a un tanque de oxígeno.
Por su parte, la defensa informó que su cliente ha sido operado en 8 ocasiones por distintas hernias, perdió la visibilidad en un ojo, está quedando sordo y está perdiendo la sensibilidad en algunas partes de su cuerpo.
Además de los cargos por narcotráfico por los que cumple una condena de 40 años de prisión, al “Jefe de jefes” se le vinculó con el asesinato del agente de la DEA, Enrique Camarena Salazar y del piloto mexicano Alfredo Zavala Avelar, ocurridos en 1985, pero está pendiente la resolución sobre su participación.
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