La muerte de Matthew Shepard a causa de la homofobia
El joven Matthen Shepard fue asesinado de manera violenta por hombres solamente porque la víctima era gay.
Las flores descansan en el banco conmemorativo de Matthew Shepard, en memoria de un estudiante gay que en 1998 fue golpeado, torturado y dejado morir cerca de Laramie, en el campus de la Universidad de Wyoming en Laramie, Wyoming, el 13 de agosto de 2022. Crédito: PATRICK T. FALLON | AFP / Getty Images
El estudiante de la Universidad de Wyoming, Matthew Shepard, murió después de un feroz ataque contra los homosexuales, el 12 de octubre de 1998. Después de conocer a Shepard en un bar gay de Laramie, Wyoming, The Fireside Lounge, Russell Henderson y Aaron McKinney lo atrajeron al estacionamiento, donde lo golpearon y lo robaron.
Luego, los dos atacantes llevaron a Shepard, de 21 años y que pesaba poco más de 100 libras, a un lugar remoto fuera de la ciudad y ataron su cuerpo desnudo a una cerca de madera, lo torturaron y lo dejaron en el frío helado.
Un ciclista de montaña, que inicialmente pensó que su cuerpo mutilado era un espantapájaros, lo descubrió, Shepard murió poco después.
Henderson y McKinney atacaron a dos jóvenes latinos más tarde esa misma noche, golpeándolos y azotándolos con pistolas.
El presidente Clinton imploró al Congreso que aprobara la Ley de Prevención de Crímenes de Odio a raíz del incidente.
Para evitar una sentencia de muerte, Russell Henderson se declaró culpable de secuestro y asesinato en abril de 1999 y fue sentenciado a cadena perpetua.
Más tarde ese año, Aaron McKinney intentó usar una defensa de “pánico gay” en su propio juicio, alegando que los avances de Sheppard lo disgustaron. Cuando McKinney trató de presentar pruebas de que un hombre había abusado de él cuando era niño, el juez Barton Voigt no lo permitió. Descartó que la defensa era demasiado similar a la locura temporal, que no es una opción en Wyoming.
McKinney fue declarado culpable del asesinato de Shepard, pero logró escapar de la pena de muerte en gran parte gracias a los padres de Shepard.
En la tensa y tranquila sala del tribunal, Dennis Shepard le dijo al asesino de su hijo: “Nada me gustaría más que verlo morir, Sr. McKinney. Sin embargo, este es el momento de comenzar el proceso de curación. Para mostrar misericordia a alguien que se negó a mostrar misericordia”. McKinney fue sentenciado a cadena perpetua.
Las novias de Henderson y McKinney, que habían ayudado a Henderson y McKinney a deshacerse de las pruebas, fueron acusadas de cómplices del asesinato.
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