Empresario de Miami que le prendió fuego a supuesto boceto de Frida Kalo podría enfrentar acciones legales
Al empresario mexicano-libanés Martin Mobarak se le hizo buena idea quemar un boceto de la pintora Frida Kahlo y ahora podría enfrentar a la justicia, aunque haya pagado por la obra
Martin Mobarak argumenta que tratpo de inmortalizar una obra de Frida Kahlo transformándola en un Token no fungible. Crédito: Ronaldo Schemidt | AFP / Getty Images
Martin Mobarak, empresario mexicano-libanés y quien radica en Miami desde hace 30 años, podría enfrentar una demanda de las autoridades mexicanas debido a que le prendió fuego a un supuesto boceto elaborado por la célebre pintora mexicana Frida Kahlo, en 1944.
El incidente ocurrió en julio de este año durante una fiesta que el millonario organizó en su mansión de Miami.
Inesperadamente, Mobarak retiró el boceto de un marco dorado y ante los ojos de decenas de sus invitados lo colocó en una copa de martini para prenderle fuego.
“Tuve que hacer algo drástico para llamar la atención. Como un ave fénix que se levanta de sus cenizas, esta colección de 10,000 NFT representa el renacimiento y la inmortalidad de una pieza atemporal”, declaró recientemente al The New York Times tratando de explicar que su objetivo era convertir al boceto en algo eterno, pues antes de destruirlo lo había transformado en un Token no fungible (NFT), el cual pretendía vender a 10,000 interesados en pagar por cada uno $4,000 dólares, estrategia que tampoco le funcionó pues hasta el momento únicamente a comercializado cuatro.
En este sentido, aunque Mobarak argumenta ser el propietario del boceto titulado “Fantasmones Siniestros pintado con acuarela, crayón, lápiz y tinta, el cual presuntamente le compró a un coleccionista privado en 2013, el hecho de haberlo destruido le puede generar repercusiones legales provenientes del entorno artístico.
A finales de septiembre, las autoridades patrimoniales mexicanas informaron sobre el inicio de investigación penal dirigida hacia el acto realizado por Mobarak, esto en virtud de que haber destruido la obra de Frida Kahlo podría constituir un delito que le implicaría enfrentar una sentencia de una década de prisión, así como una multa equivalente al costo de la obra de arte.
Ahora bien, en caso de que se compruebe que el boceto no era original también le generaría al millonario mexicano-libanés una sanción legal, pues se le consideraría falsificador de un NFT que ha comercializado bajo el argumento de que representa a una obra artística original.
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