Zoológico en México mató y cocinó cuatro cabras para una fiesta, además de vender animales ilegalmente

De acuerdo con una investigación, en ese lugar dejaron morir un venado, una cebra fue intercambiada y 10 serpientes están desaparecidas

Cabras

En el lugar había 10 ejemplares de cabras pigmeas. Crédito: EFE

Aunque los zoológicos son lugares en donde se vela por la salud y la crianza de los animales que ahí se exhiben, no siempre resulta así, tal como ocurrió en uno de estos parques ubicados en el estado de Guerrero, en México.

Se trata del zoológico de Chilpancingo, mejor conocido como Zoochilpan, en donde una serie de denuncias de maltrato hacia los animales y desaparición de otros reveló la grave situación que se vivía en ese recinto.

Y es que, luego de una investigación realizada por la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales de Guerrero (Semaren), se detectaron varias anomalías bajo el cargo del exdirector del zoológico José Rubén Nava Noriega.

Una de las situaciones más graves que se descubrieron fue el sacrificio de cuatro cabras pigmeas para cocinarlas y comerlas en las celebraciones de año nuevo.

Al respecto, el jefe del Departamento de Vida Silvestre de esa Secretaría, Fernando Ruiz Gutiérrez, informó que había 10 ejemplares de cabras pigmeas, de las que el ahora exdirector dispuso de cuatro para utilizarlas como alimento en la posada de fin de año. Incluso, reveló que fueron cocinadas en las instalaciones del mismo zoológico.

“Con este hecho se pone en riesgo la salud de los consumidores porque no eran animales aptos para el consumo humano”, dijo el funcionario.

Otras de las irregularidades detectadas fueron la venta ilegal de cuatro watusis (una raza bovina originaria de África), nueve borregos de Berbería y una guacamaya, además de que una cebra fue intercambiada por ciervos rojos sin autorización y 10 serpientes están desaparecidas.

Aún se desconoce el destino real de los animales y si cuentan con las condiciones adecuadas para su manutención, como obliga un intercambio legal.

Cabe señalar que todo esto salió a la luz después de que en enero se dejó morir a un venado, que fue rescatado por habitantes del fraccionamiento Jardines de Zinnia, el cual fue trasladado al lugar con heridas leves y sin embargo murió.

Sobre ese hecho, el secretario de Medio Ambiente y Recursos Naturales de Guerrero, Ángel Almazán Juárez, informó a la agencia Efe que, como resultado de las investigaciones, se supo que el ejemplar no fue atendido de manera adecuada, pues se le suturó sin anestesia y se le cortó la cornamenta.

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