Estudiante de la Universidad de Kentucky se enfrenta a 13 años de cárcel por racista y agresiva
Sophia Rosing dejó de ser alumna de la facultad y ahora su libertad depende de la resolución de un juez, pues hasta su abogado reconoce que necesita rehabilitarse en manos de expertos
La declaración de inocencia presentada por Sophia Rosing pudiera ser su mayor argumento en contra para que se le conceda quedar en libertad. Crédito: Dimas Ardian | Getty Images
Haberse declarado inocente en una audiencia inicial pese haber llamado despectivamente “perr& negr# fea”, al menos 200 veces a una empleada escolar, y después de agredir a un oficial de policía, podría costarle 13 años de libertad a Sophia Rosing.
La estudiante ha sido acusada por un gran jurado del condado de Fayette por ejercer una conducta racista en contra de Kylah Spring, en noviembre del año pasado, pero además enfrenta tres cargos de agresión en cuarto grado y por alterar el orden público, además de intoxicación pública.
De acuerdo con la ley, agredir a un policía conlleva una sentencia máxima de prisión de 10 años, mientras que los tres cargos de agresión en cuarto grado representan cada uno un máximo de 12 meses en prisión.
Cabe mencionar que antes de ser detenida por las autoridades, la exestudiante de negocios y mercadotecnia comenzó a agredir a Spring, quien trabajaba en la recepción que brinda acceso a los dormitorios del campus de la Universidad de Kentucky en Lexington, Kentucky.
Documentos judiciales revelan que la joven de 22 años “pateó y mordió” a los oficiales cuando intentaban arrestarla el 6 de noviembre cerca de las 4 a.m.
De inmediato, la estudiante fue llevada al centro de detención del condado de Fayette, donde se negó a identificarse, por lo que inicialmente fue procesada como Jane Doe.
Sin embargo, la detenida fue liberada con una fianza de $10,000 dólares y sus padres fueron a recogerla tratando de ocultar su rostro para que no lograra ser identificado, lo cual no pudo ser pues un video donde se le observa causando su alboroto en la Universidad fue divulgado en redes sociales.
Bajo dicha situación, Rosing terminó por abandonar la escuela, pero eso no le eximió de responder ante un juez sobre su violenta y escandalosa conducta.
Por su parte, Eli Capilouto, presidente de la Universidad de Kentucky, señaló que Rosing fue suspendida de forma “interina” mientras continuaban con su investigación.
En defensa de la exalumna, el abogado que la representa indicó que asistirá a rehabilitación para abordar sus problemas y brindarle un “entrenamiento de sensibilidad racial”.
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