Ordenan a exasesor de Trump entregar correos electrónicos relacionados con la Casa Blanca 

Pete Navarro, quien se desempeñó como asesor de Donald Trump mientras éste estuvo al frente de la Casa Blanca, deberá entregar los correos que envió o recibió durante sus casi cuatro años como asistente de la Casa Blanca

Peter Navarro

Peter Navarro fue asesor de Donald Trump durante su mandato. Crédito: Chip Somodevilla | Getty Images

Un juez federal ordenó al exasesor de Donald Trump, Pete Navarro, entregar al gobierno todos los correos electrónicos que envió, así como los que recibió durante sus casi cuatro años como asistente de la Casa Blanca en su cuenta privada. 

La jueza del Tribunal de Distrito de los Estados Unidos Collen Kollar-Kotelly rechazó los argumentos que presentaron los abogados de Navarro en un intento por anular una demanda civil que el Departamento de Justicia (DOJ) presentó en agosto de 2022 con la intención de recuperar los mensaje que el exasesor de Trump manejó a través de una cuenta personal de ProntonMail. 

De acuerdo con CNN, Kollar-Kotelly indicó (como lo hizo en su momento NARA) que todos los correos privados están sujetos a la Ley de Registros Presidenciales, pero hizo énfasis en una disposición aprobada por el Congreso y firmada por el expresidente Barack Obama en 2014. 

Dicha disposición requiere que los mensajes relacionados con el trabajo creados o enviados desde una cuenta personal se reenvíen a una cuenta oficial. 

Dr. Navarro sostiene que no tiene deberes estatutarios bajo la PRA. Esta posición anularía todo el propósito del estatuto, es decir, garantizar que los registros presidenciales, tal como se definen, se recopilen, mantengan y pongan a disposición del público”, dijo Kollar-Kotelly. 

Y siguió “la PRA deja en claro que los asesores presidenciales como el Dr. Navarro son parte integral del esquema estatutario en el sentido de que están obligados a preservar los registros presidenciales durante su mandato para que puedan ser transferidos a (la Administración Nacional de Archivos y Registros) en el fin de una administración”.

Además, aprovechó para echar por tierra los argumentos de Navarro que indican que al reproducir los correos electrónicos pondría en riesgo su derecho de la Quinta Enmienda contra la autoincriminación.

“Todos los correos electrónicos en la cuenta de correo electrónico personal del Dr. Navarro, ya sea creados o recibidos, están sujetos a ser evaluados como posibles registros presidenciales si surgieron de su empleo en la administración”, señaló Kollar-Kotelly. 

Y ordenó la presentación inmediata de entre 200 y 250 correos electrónicos que sus abogados había encontrado cuando realizaron una búsqueda proporcionados por la Administración Nacional de archivos y Registros de sus correos electrónicos el verano pasado. 

También se ordenó a Navarro una reunión dentro de los 30 días hábiles para trabajar un plan para identificar y entregar los correos electrónicos que deben producirse bajo PRA. 

Navarro llamó la atención de los investigadores del Congreso porque en sus últimas semanas en la Casa Blanca cambió su enfoque hacia los esfuerzos para ayudar a Trump a anular los resultados de las elecciones de 2020. Preparó un informe basado en afirmaciones desacreditadas de fraude y trabajó con el antiguo aliado de Trump, Steve Bannon, y los legisladores republicanos para diseñar estrategias para objetar los resultados el 6 de enero de 2021.

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