Retiran fresas orgánicas congeladas del mercado por posible vínculo con el brote de hepatitis A
En 2022, autoridades sanitarias en Estados Unidos y Canadá dieron a conocer un brote de hepatitis vinculados con fresas orgánicas frescas producidas en México y a un año del suceso, de nuevo aparecieron casos con la misma cepa
La hepatitis A es una enfermedad viral que puede provocar daño en el hígado y, en casos raros, falla hepática y la muerte. Crédito: FRED TANNEAU | Getty Images
Un brote de hepatitis A puede estar relacionado con ciertas marcas de fresas orgánicas congeladas que se venden en todo el país en minoristas como Trader Joe’s y Costco, según la Administración Federal de Drogas, que anunció el retiro de los productos esta semana.
En todos los casos, las personas informaron a los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades que habían comido fresas orgánicas congeladas que finalmente se determinó que habían sido importadas de granjas en Baja California, México, el año pasado y vendidas a una variedad de minoristas bajo múltiples marcas.
“Además, la cepa del virus de la hepatitis A que causa enfermedades este año es genéticamente idéntica a la cepa que provocó el brote de infecciones por el virus de la hepatitis A en 2022, que se vinculó con fresas orgánicas frescas importadas de Baja California, México, y vendidas en varios minoristas”, dijo la FDA.
En respuesta a la investigación en curso, California Splendor y Scenic Fruit esta semana retiraron voluntariamente ciertos lotes de fresas congeladas, dijo la FDA.
La hepatitis A es una enfermedad viral que puede provocar daño en el hígado y, en casos raros, falla hepática y la muerte. La enfermedad suele ocurrir entre los 15 y 50 días después de que se ingirió comida o agua contaminadas. Entre los síntomas se incluye fatiga, náusea, vómito, dolor abdominal y coloración amarillenta de la piel.
La enfermedad puede durar desde unas pocas semanas hasta varios meses si es grave. En casos raros, la infección por hepatitis A puede progresar a insuficiencia hepática, y aquellos que tienen una enfermedad grave preexistente o tienen un sistema inmunológico comprometido corren mayor riesgo.
Aquellos que consumieron fresas posiblemente contaminadas en las últimas dos semanas y no se han vacunado contra la hepatitis A deben consultar de inmediato a un médico, informó la FDA.
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