5 riesgos de comer insectos que pueden afectar gravemente tu salud

Recientemente, la escritora gastronómica canadiense Tiffany Leigh reveló que alimenta a su hija de 18 meses con grillos como fuente de proteínas, pues según ella, le ahorra cientos de dólares en facturas de comestibles.

En declaraciones para New York Post dijo que los grillos tienen beneficios nutricionales importantes tanto para niños como para adultos, y a precios más bajos que otras fuentes de proteínas.

Ella afirmó que cuando viajó a lugares como Vietnam y Tailandia, admiró cómo se añadían insectos a los platos clásicos y decidió hacer lo mismo con su propio hijo en un experimento de tres semanas.

Los riesgos de comer insectos

Aunque en 2013, la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) publicó un estudio que encontró que consumir estos bichos podría ser una solución para el cambio climático y el hambre en el mundo, aún hay mucho que decir.

1. Sustancias antinutritivas y tóxicas

Se trata de sustancias que impiden o dificultan la absorción de nutrientes. El material principal del que está formado el exoesqueleto de los artrópodos, llamado quitina puede afectar negativamente en la digestión de los insectos.

También contienen alcaloides que podrían llegar a ser tóxicos para los consumidores. Algunos insectos, como las pupas del gusano de seda africano (Anaphe venata), contienen tiaminasa y su ingesta puede causar deficiencia de tiamina (vitamina B1).

2. Microorganismos patógenos (bacterias)

Según informes de la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) y otros estudios, los insectos pueden estar contaminados con bacterias patógenas (como Salmonella, Campylobacter, Escherichia coli y Bacillus cereus).

3. Parásitos

En ocasiones los insectos sirven como vectores de determinados parásitos. Así, se ha detectado en el cuerpo de cucarachas y moscas la presencia de varios protozoos y helmintos en diferentes fases de desarrollo.

Algunos insectos actúan también como hospedadores intermediarios de ciertos parásitos. La infestación en el hombre provoca un cuadro clínico con síntomas gastrointestinales.

4. Contaminantes químicos

La presencia de contaminación química es uno de los mayores peligros asociados al consumo de insectos, principalmente de los de vida silvestre.

Pudieran contener metales pesados como cadmio, plomo o cobre, entre otros.

5. Alergias y reacciones cruzadas

Muchos artrópodos pueden inducir reacciones alérgicas en personas susceptibles originadas por elementos como tropomiosina, arginina quinasa, gliceraldehído 3-fosfato deshidrogenasa o hemocianina.

También se han identificado reacciones cruzadas, por ejemplo, entre crustáceos, cucarachas y ácaros. La sintomatología de la alergia a insectos es muy variada, pudiendo manifestarse desde una simple urticaria hasta un choque anafiláctico.

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