Calidad del aire en EE. UU. mejora pero la alerta por incendios forestales canadienses se mantiene
Los científicos advierten que es más probable que tales eventos climáticos que alteran la rutina continúen interrumpiendo la vida diaria a medida que el planeta se calienta

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Las principales ciudades de EE. UU. quedaron atrapadas bajo una espesa capa naranja de smog la semana pasada debido a incendios forestales canadienses pero ya están mejorando.
Según la reseña de CNN, la actividad de incendios en la provincia de Quebec ha mejorado, y el área cubierta por humo ahora es solo el 7% de lo que era la semana pasada.
Por otra parte, las temperaturas ligeramente más frías y la mayor humedad en Canadá significan menos humo atravesando la frontera.
Sin embargo, la temporada de incendios canadienses se mantiene. De hecho se prevén nuevos durante este verano. Y varios estados de EE. UU. todavía sufren una mala calidad del aire.
“El humo de los incendios forestales canadienses continúa siendo transportado hacia el sur por los vientos hacia los EE. UU., lo que resulta en una calidad del aire de moderada a insalubre en partes del noreste, el Atlántico medio, el valle de Ohio y el medio oeste el viernes”, dijo el Servicio Meteorológico Nacional.
El humo de los incendios forestales contiene partículas diminutas, o PM2.5, el más pequeño de los contaminantes. Cuando se inhala, puede penetrar profundamente en el tejido pulmonar y entrar en el torrente sanguíneo.
Afecciones a la salud
Si bien lo peor ya pasó para la mayoría de las regiones del noreste y del Atlántico medio, los contaminantes del aire potencialmente dañinos en la ciudad de Nueva York, Filadelfia y Washington, DC, permanecieron el viernes antes de desaparecer lentamente durante los próximos días.
Alrededor de 50 millones de personas en varios estados del medio oeste y la costa este estaban bajo alertas de calidad del aire el viernes temprano.
Los purificadores de aire portátiles así como los sistemas de calefacción central, ventilación y aire acondicionado con filtros de aire de partículas de alta eficiencia son la mejor manera de ayudar a proteger contra el humo de los incendios forestales.
Según los científicos es más probable que tales eventos climáticos que alteran la rutina continúen a medida que el planeta se calienta. Con lo cual se generarán incendios forestales más severos y frecuentes.
Ese smog proviene de fuentes que incluyen la combustión de combustibles fósiles y tormentas de polvo. Además está relacionado con varias complicaciones de salud, como asma, enfermedades cardíacas y otras enfermedades respiratorias.
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