Fisioterapia prenatal: qué es y cómo puede ayudarte antes del parto
Durante el embarazo ocurren muchos cambios en el cuerpo, es por ello que un fisioterapeuta puede ayudarte a comprender y gestionar problemas comunes como el dolor, desarrollar fuerza, prepararte para el parto y ayudarte después del nacimiento del bebé
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La fisioterapia prenatal puede ayudar a las mujeres a comprender los cambios que ocurren durante el embarazo. Es común experimentar dolores lumbares, de cadera o pélvicos a medida que el bebé va creciendo y el centro de gravedad del cuerpo cambia empujando todo hacia adelante. Los fisioterapeutas pueden ayudar a que la madre se sienta más cómoda en el proceso.
No existe un momento adecuado para acudir al fisioterapeuta, usualmente las mujeres acuden a partir de la semana 10 de embarazo pues es cuando comienzan a sentir molestias. Sin embargo, otras mujeres no presentan dolor sino hasta la semana 31. En cualquier caso, el personal de salud puede planificar y desarrollar estrategias para mitigar el dolor en cualquier punto de la gestación.
Así lo explicó la fisioterapeuta Sara Atkinson de Friendlies Physiotherapy & Allied Health Services, quien apuntó a que no solo se trata de reducir el dolor sino de preparar el suelo pélvico para ayudar a la recuperación posnatal. La fisioterapia postparto puede ayudar a su cuerpo a volver a donde estaba antes del embarazo, como por ejemplo a comenzar nuevamente la actividad física.
Mitigación de riesgos y beneficios
El Departamento de Salud y Atención a Personas Mayores del Gobierno de Australia indica que la fisioterapia puede ayudar a mitigar múltiples riesgos que corren las mujeres durante el embarazo, como los siguientes:
- Traumas de nacimiento neonatal o lesiones de nacimiento: son afecciones que se producen durante el parto y que pueden afectar tanto a la madre como al bebé. En los recién nacidos pueden incluir desde hematomas hasta un hueso roto. Las lesiones en la madre pueden ir desde desgarros en la zona vaginal o perineal hasta daños en el suelo pélvico, las heridas de cesárea también pueden considerarse una lesión física de nacimiento.
- Incontinencia urinaria durante el embarazo y después del parto: hasta el 67% de las mujeres pierden orina involuntariamente cuando ríen, estornudan, tosen o hacen ejercicio durante la gestación.
- Dolor lumbar: alrededor del 50% de las mujeres embarazadas presentan afecciones musculoesqueléticas sobre todo en la cintura pélvica.
- Disfunción del suelo pélvico: incluye incontinencia, disfunción sexual y prolapso. El prolapso uterino ocurre cuando los músculos y los ligamentos del suelo pélvico se estiran y debilitan hasta el punto de que ya no proporcionan sostén al útero.
- Complicaciones del parto: lento progreso en el trabajo de dar a luz, hemorragias postparto o dificultad para desprender la placenta.
El fisioterapeuta puede ayudar a prevenir estos riesgos y tratar nuevas afecciones. Además le ayudará a conocer posiciones útiles para el parto, el nacimiento y otras que pueden ser útiles para colocar al bebé en la posición correcta.
Los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos (NIH, por sus siglas en inglés) indican que 54 estudios revelan la eficacia de la fisioterapia prenatal en la prevención y mejora de determinados síntomas. Resulta beneficiosa como efecto preventivo ante el dolor lumbar o de la cintura pélvica.
Además, ayuda a mantener un peso saludable, mejora la incontinencia y el masaje perineal disminuye los traumas de nacimiento. Por su parte, el masaje de pies y el uso de medias recomendadas por la fisioterapia reducen los edemas y los síntomas negativos en las piernas.
Técnicas comunes
El Departamento de Salud y Atención a Personas Mayores del Gobierno de Australia indica que los fisioterapeutas pueden utilizar una serie de técnicas y ejercicios para ayudar a mejorar el movimiento general y reducir las molestias.
Generalmente, la eficacia de estas terapias se ve con el tiempo por lo que es posible que le recomienden repetir los ejercicios en casa. Algunas de las técnicas más utilizadas por los fisioterapeutas son las siguientes:
- Masaje o ultrasonido en diversas partes del cuerpo.
- Manipulación de ciertas articulaciones.
- Estiramiento de los músculos: comúnmente laterales y hacia adelante, un estiramiento de “gato” y círculos pélvicos.
- Guía sobre cómo moverse para no agravar afecciones existentes.
- Recomendaciones de ejercicio.
- Consejos sobre el uso de cinturones de soporte o pantalones de compresión.
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