Donald Trump planea cerrar el Departamento de Educación en caso de ganar las elecciones

Desde su etapa como presidente, el republicano planteó la idea de fusionar los departamentos de Educación y Trabajo, pero su propuesta careció de respaldo

Donald Trump implementaría cambios radicales en su segundo mandato

Donald Trump pretende reasignarles a los estados las funciones del Departamento de Educación. Crédito: Sean Rayford | Getty Images

La extraña fijación que Donald Trump tiene en contra del Departamento de Educación volvió a aflorar, pues como propuesta de campaña rumbo a las elecciones presidenciales del próximo año sostiene que dicha dependencia dejará de funcionar durante su segundo mandato.

Mediante un mensaje grabado, el republicano de 77 años indicó que les delegará por completo a los estados el manejo de la educación estudiantil.

Vamos a poner fin a la educación que sale de Washington, DC. Vamos a cerrarlo, todos esos edificios por todos lados y personas que en muchos casos odian a nuestros hijos. Vamos a enviarlo todo de regreso a los estados“, señaló.

Desde su campaña presidencial de 2016, el magnate neoyorquino planteó la misma propuesta y al llegar a la Casa Blanca propuso fusionar los departamentos de Educación y Trabajo en una sola agencia federal como parte de un plan de reestructuración gubernamental, pero el proyecto no logró cristalizarse.

El plan de Donald Trump es que los estados administren en su totalidad los recursos financieros destinados a la educación. (Michael M. Santiago/Getty Images)

Aunque la facultad de establecer planes de estudios y escuelas, así como determinar la elegibilidad de inscripción reside en los estados y las juntas escolares locales; el Departamento de Educación se encarga de administrar fondos federales asignados por el Congreso, no sólo a las escuelas K-12 (entre el jardín de niños y el 12º grado), sino también a las universidades.

Por si fuera poco, la dependencia también gestiona los programas federales de préstamos y ayudas estudiantiles, además de establecer estándares de rendición de cuentas para las instituciones de educación superior.

En este sentido, la propuesta de Donald Trump se torna compleja de llevar a cabo, pues le daría a los estados una mayor carga de trabajo de responsabilidades, lo cual le llevaría cierto tiempo para asimilar y organizarse.

Otras modificaciones que el expresidente pretende realizar como prioridades educativas son la introducción de la oración en las escuelas públicas, enseñar a los niños a amar a su país y aumentar el acceso a pasantías para los estudiantes.

Durante un segundo mandato de Trump en el gobierno, orientación sexual, identidad de género y temas de racismo, también podrían sufrir cambios en los planes de estudios en las escuelas.

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