Recuerdan la matanza del 2018 en Thousand Oaks
Hace cinco años fueron asesinadas 12 personas en el bar Borderline Bar & Grill; hasta el día de ayer, el país había registrado más de 550 tiroteos masivos en lo que va de año
Se cumplieron cinco años de la matanza de 12 personas -nueve hombres y tres mujeres- en el Borderline Bar & Grill de Thousand Oaks, y autoridades volvieron a hacer un llamado para detener la violencia sin sentido que se ha desatado en Estados Unidos y que ha provocado un acumulado de más de 500 balaceras en lo que va de 2023.
El 7 de noviembre de 2018, aproximadamente a las 11:18 p.m., Ian David Long, un veterano del Cuerpo de Marines de los Estados Unidos abrió fuego en el bar de estilo country en el oeste.
El saldo total de muertes fue 13, incluyendo al pistolero, quien se suicidó, y otras 15 personas resultaron heridas.
Investigadores de la masacre detallaron que Ian David Long estaba armado con una pistola semiautomática Glock 21 calibre .45 que había comprado legalmente con una luz de arma táctica Viridian X5L y una mira laser, siete cargadores prohibidos de alta capacidad , un total de 190 balas, una navaja, diez bombas de humo y fuegos artificiales.
Detallaron que el asesino múltiple había tenido varios encuentros con estudiantes de la Universidad Estatal de California en Northridge, incluyendo uno donde, supuestamente, un estudiante le dijo que “cualquiera que se uniera al ejército merecía ser asesinado a tiros en el extranjero”, lo que podría haber desencadenado su odio hacia otros estudiantes.
“California nunca olvidará a las víctimas y sobrevivientes de este tiroteo sin sentido”, dijo Izzy Gardon, portavoz de la oficina del gobernador Gavin Newsom, a La Opinión. “Nunca descansaremos en nuestra determinación de prevenir este tipo de tragedias mediante el avance de medidas de sentido común para la seguridad de las armas de fuego”.
Ley de “bandera roja”
De acuerdo con el asambleísta Miguel Santiago, en California las leyes de “alerta roja” podrían prevenir muchas masacres.
“El gobernador [Gavin] Newsom ha hecho un buen trabajo para prevenir más violencia por las armas”, declaró el legislador, a La Opinión.
Y, según investigadores de UC Davis, en California la ley de bandera roja o AB 2870 ha evitado por lo menos 58 tiroteos masivos en los últimos tres años.
En el 80% de los casos, los presuntos pistoleros mostraron señales de peligro y de sus malas intenciones a familiares o amigos. También usan las redes sociales y al ser descubiertos sus planes, son esos momentos cuando se puede activar la llamada ley “Armas de fuego: órdenes de restricción de violencia armada”.
La legislación del asambleísta Miguel Santiago, autoriza a un tribunal a emitir una orden de restricción de violencia armada y prohibir que una persona compre o posea un arma de fuego o municiones por un período de uno a cinco años.
La restricción está sujeta a renovación por períodos adicionales de uno a cinco años, si el individuo representa un peligro significativo de autolesión o daño a otra persona por tener un arma de fuego y la orden es necesaria para evitar lesiones a sí mismo u otras personas.
“Para prevenir y acabar con las matanzas, el gobierno federal tiene que tomar acción”, dijo Santiago. “Nosotros hemos tomado pasos fuertes, pero hay estados donde van a seguir con leyes débiles, y los republicanos [en el Congreso] han impedido leyes más fuertes contra las armas”.
Las órdenes de restricción de violencia armada de California (Gun Violence Restraining Order o GVROs) han sido replicadas en otros 19 estados -incluyendo los estados republicanos de Indiana y Florida- y el Distrito de Columbia.
California también tiene otro programa de incautación de armas que es el único similar en el país, según el Departamento de Justicia del fiscal Rob Bonta.
Según el fiscal, agentes estatales del orden pueden allanar la residencia de alguien a quien legalmente se le prohíba poseer armas y confiscárselas.
La prohibición incluye a personas condenadas por un delito grave o un delito menor violento, o que tienen una orden de restricción por violencia doméstica o padecen una enfermedad mental grave.
Coctel mortífero
“La falta de regulaciones estrictas a nivel federal de las armas semiautomáticas, que son armas de guerra, nunca deberían estar en manos de civiles”, manifestó Salvador Sanabria, líder de derechos civiles en la organización El Rescate.
Sanabria consideró que, un segundo factor que contribuye a los tiroteos masivos como el ocurrido en Sherman Oaks y los de este año el 21 y 23 de enero, en Half Moon Bay y Monterey Park, han sido consecuencia “de una epidemia en temas de salud mental”.
“Hemos visto que la mayoría de los tiradores sufren de grandes trastornos mentales y eso es parte de un coctel mortífero que conlleva a las tragedias que se están repitiendo continuamente en Estados Unidos”, dijo Sanabria.
En Half Moon Bay, el pistolero, Chunli Zhao, de 66 años, le arrebató la vida a ocho personas, en lo que fue descrito como un acto violento relacionado al trabajo.
Entre tanto, en Monterey Park, el asesino, Huu Can Tran, quien al final se suicidó, ametralló y mató a 11 personas en el día de la celebración del Año Lunar. Utilizó un rifle calibre .308, que es popular para cazar venados, osos negros y jabalíes.
La tragedia es considerada como el segundo ataque más mortífero en el condado de Los Ángeles, después de la tragedia de Sherman Oaks.
“Un tercer ingrediente del coctel mortífero es la politización ilógica en el tema del derecho constitucional para la portación de armas en este país”, añadió Sanabria. “No hay sensatez en los debates sino una politización manipuladora y absurda”.
Violencia en el condado de Los Ángeles
Miguel López, portavoz del Departamento del Alguacil del condado de Los Ángeles (LASD), destacó que la proliferación de las armas podría solucionarse mediante la educación
“Educar a las personas para que sepan del peligro de tener un arma en las manos equivocadas puede ayudar”, dijo. “Hay quienes pueden comprar legalmente un arma y la venden, y les borran el número de identificación para que las autoridades no puedan localizar dónde están esas armas”.
López informó que, en el condado el uso de armas de fuego ha sido más sobresaliente en las estaciones Century, Compton, Sur Los Ángeles, Palmdale y Lancaster.
En efecto, aunque no se especifica si la causa de muerte ha sido por las armas, de un asesinato cometido en 2002, ahora van cinco; y en Lancaster, de 10 asesinatos hace un año, ahora van 22, es decir, ha habido un aumento del 120%.
Y, entre 183 de los más de 550 tiroteos que se habían registrado antes del 4 de julio, el Archivo de Violencia de las Armas (Gun Violence Archive) dio a conocer que el condado de Los Ángeles era el cuarto más violenta con 17 balaceras, tan solo detrás de las 23 registradas en Memphis e igual número en Milwaukee, y 41 en Chicago.
Otras zonas de violencia eran: Cleveland, con 15 tiroteos; Washington D.C. (15); Detroit (14); Baltimore (11); Nueva York (11); Memphis (10); Filadelfia (10); Houston (9) y Atlanta (7).
Armas fuera de las calles
“Hoy hace cinco años, doce individuos salieron a disfrutar una noche como cualquier otra entre amigos y se convirtieron en otra cifra más de la horrible oleada de violencia armada que vive nuestro país”, dijo la supervisora del condado de Los Ángeles, Janice Hahn. “Tengo presentes en mis pensamientos a sus seres queridos y a sus comunidades en este aniversario de aquella noche”.
“La solución definitiva a esta epidemia de violencia armada está en manos del Congreso, pero ante su evidente inacción, yo pretendo seguir haciendo todo lo posible dentro de mi poder para proteger a nuestras comunidades”, resaltó la supervisora Hahn.
Desde mayo pasado, su oficina ha llevado a cabo ocho eventos de recompra de armas. En total, en el Distrito 1 del condado de Los Ángeles, que presenta Hahn, se han recolectado 1,292 armas.
“Son 1,292 armas que no serán robadas ni utilizadas en un delito, o que no caerán en manos de un niño o de alguien que esté considerando suicidarse”, subrayó.
Salvador Sanabria agregó: “Si estuviera en mi poder el voto, pediría una prohibición total de las armas semiautomáticas, fusiles y pistolas en manos de los civiles; es una posición radical, pero hay países de Europa donde se tiene prohibido tenerlas, ya que son exclusivas de la milicia, y solamente las usan para defender la soberanía, no para matar gente”.