Un perro con restos humanos en el hocico reveló la existencia de fosas clandestinas en Jalisco
Un perro con un brazo humano en el hocico alertó a los habitantes de Zapopan, Jalisco, y derivó en el hallazgo de 7 fosas clandestinas con varios restos abandonados
La desaparición de personas es una alarmante situación en México, pues en ese país constantemente se descubren fosas clandestinas con decenas de cuerpos, y recientemente se encontró uno de estos lugares en el estado de Jalisco gracias a un grupo de perros callejeros.
Como si se tratara de la escena de una película de terror, uno de esos animales fue el responsable del hallazgo, al llevar en el hocico un brazo humano, lo que alertó a los pobladores de la ciudad de Zapopan, quienes reportaron lo ocurrido.
Fue así como se descubrió un sitio en el que se encontraron siete fosas, las cuales comenzaron a investigarse, pero la presencia de los canes ha hecho que el horror sea mayor, pues debido a que los perros entran y salen del sitio sin ninguna restricción, es probable que se hayan alimentado de los restos humanos.
Así lo reveló al diario Milenio María de Lourdes Ruíz, integrante del colectivo Luz de Esperanza, quien señaló que la extremidad en el hocico del perro y que dio origen al descubrimiento, aún presentaba tejido y eran visibles los tatuajes que tenía.
Pérdida de restos en las fosas
Hasta el momento no se han dado a conocer cifras exactas del hallazgo, sólo se informó que se han encontrado varios paquetes con restos humanos, sin embargo, la presencia de los perros callejeros agrava la situación, pues ya se han perdido algunas extremidades.
“Imagínate cuántas piezas no pudieran estar sacando los animales por la noche y que nunca vamos a encontrar”, dijo al semanario Proceso Héctor Flores, dirigente del colectivo antes mencionado.
Flores añadió que el terreno donde están las fosas es amplio y hay muchos perros en el área, “aparte de que posiblemente no es la única parte donde haya restos, por lo que es necesario que a la par del procesamiento se haga una búsqueda generalizada con colectivos y con personal de búsqueda”.
Cabe señalar que en el predio donde se hallaron las fosas, los cuerpos de las personas estaban “aventados”, es decir que no se enterraron bien, como ocurre en otros sitios de inhumación clandestina, según dijo Ruiz a Telediario, lo que provocó que los perros llegaran al sitio atraídos por el olor.
Por ahora a los miembros del colectivo solo les queda esperar que la zona se resguarde de manera correcta, y que las autoridades muestren los resultados de los cuerpos hallados allí, siempre con la esperanza de encontrar a sus seres queridos que desaparecieron.
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