Por qué no deberías solicitar un billete de $2 dólares en un banco, según una cajera

Es muy raro que algún billete o moneda cause repulsión entre las personas. Estoy seguro de que si alguien se te acerca y te regala miles de billetes de $1 dólar, los tomas sin chistar. Si fueran billetes de $2 dólares, quizás lo pensarías dos veces. Tal vez nunca lo harás, si ya vives por años en Estados Unidos, pero si tu estancia es inicial, este mensaje es para ti: te vamos a decir por qué no deberías solicitar un billete de $2 dólares en un banco. Una cajera de banco lo responde.

El portal de GOBankingRates charló con una cajera de banco, que solo dio a conocer su nombre, Rachel, para entender por qué no es recomendable solicitar o aceptar billetes de $2 dólares en un banco.

1. Quizás no tengan

Los billetes de $2 dólares son desairados tanto por los consumidores estadounidenses como por las instituciones financieras. Según la banquera, “Cuando alguien los pide, normalmente tenemos que encargarlos, lo que, sinceramente, es un fastidio”.

2. Desorganizan la caja

De acuerdo con Rachel, las cajas registradoras de los bancos tienen espacios para los billetes que más ocupan: de $1, $5, $10 y $20 dólares. Los billetes de $2 dólares ni siquiera tienen un lugar específico y, para meterlos, se desorganiza el sistema del banco.

3. Los cajeros novatos creen que son falsos

Como se dijo, es posible que el banco no tenga. Una de las posibles razones es porque los mismos cajeros los rechazan creyendo que son falsos. “Muchos de los cajeros más nuevos nunca han visto un billete de $2 dólares”, aseguró Rachel. Este tipo de situaciones también genera retrasos en la fila, porque suele requerirse la presencia de un superior para aclarar y concretar la transacción solicitada.

4. Difíciles de gastar

No solo los cajeros creen que pueden ser falsos, los dependientes también. Aun cuando el banco resuelva tu solicitud, es posible que te arrepientas, porque para deshacerte de ellos va a ser más que complicado.

5. La gente los ahorra o colecciona (aunque no suban su valor)

“Creen que es genial o que trae suerte”, menciona Rachel. Por su rareza, la mayoría de los estadounidenses se quedan con ellos, por lo que ponerlos en circulación es en extremo difícil. Misma razón que genera que los bancos no los tengan o igual los arrumben en un rincón oscuro, como cualquier coleccionista lo haría en su ático o garaje.

“Al final, los billetes de $2 dólares no son prácticos para la mayoría de las personas. No se usan mucho y las probabilidades de que consigas uno de esos míticos que valen mucho dinero son muy escasas. Claro, son lindos y extravagantes, pero seamos realistas: es dinero en efectivo”, concluye.

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