Casa Azul de mamá de Miguel Bosé ahora se renta para vacaciones
La Casa Azul, en la que Lucía Bosé vivió por varias décadas, puede ser alquilada en España para pasar más de una noche en familia
La emblemática Casa Azul, que perteneció a la fallecida Lucía Bosé, ha estado en boca de todos en los últimos meses, luego de que fuera puesta a la venta y cambiara de dueños, quienes encontraron en su emblemática construcción una auténtica minita de oro para los turistas que visitan la comunidad de Brieva, en Segovia.
La propiedad, que perteneció a los Bosé por varias décadas, está completamente equipada y cuenta con capacidad para recibir hasta 28 huéspedes, lo que la convierte en el alojamiento ideal para las familias numerosas que gustan de quedarse a dormir en el mismo lugar.
A pesar de no ubicarse en una ciudad tan turística como otras tantas en España, ese no ha sido un impedimento para que la casa sí se rente en fechas clave, como sucede con el verano, los festivo o las vacaciones decembrinas, siendo esta, incluso, la temporada más demandada.
Para alquilar la casa es necesario hacerlo por un mínimo de dos noches y dependiendo el número de huéspedes es la cifra que se deberá pagar por noche, pues no es lo mismo usarla para una pareja que para una familia de 23 integrantes. El costo por dos noche puede alcanzar hasta los $2,000 dólares.
De acuerdo a la ficha técnica, dada a conocer por el sitio donde se encuentra anunciada, la famosa casa de Lucía Bosé goza de múltiples recámaras, 6 baños, vestíbulo, cocina, comedor, sala de estar, sala principal, sala de televisión, bar, piscina climatizada, cuarto de lavado, terraza, áreas verdes, zona de barbacoa, mesa de ping pong, futbolito, entre otras habitaciones y amenidades.
La vivienda, que es conocida como ‘Casa Azul’, fue el hogar de la matriarca de los Bosé por 23 largos años, razón por la que tuvo un gran valor sentimental para ella, a tal grado de que se negó a dejarla a pesar de la insistencia de sus hijos, en especial de Miguel, quien en repetidas ocasiones intentó que se fuera a vivir con él, pero siempre recibió respuestas negativas.
El inmueble, de 4,520 pies cuadrados y distribuido a lo largo de tres pisos, fue sumamente especial para la familia, pero a pesar de ello tuvieron que desprenderse de él debido a los altísimos gastos por concepto de manutención.
Al ubicarse en un pueblo con muy pocos habitantes, la Casa Azul es ideal para los amantes de la naturaleza y de su privacidad, razón por la que no solo se llegó a ofrecer, en su momento, como residencia permanente, sino que también como casa rural o de vacaciones.
Lucía Bosé murió el 23 de marzo de 2020, a los 89 años, en el Hospital General de Segovia.
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