Ticketmaster admitió filtración de datos de usuarios en México

Ticketmaster México ha confirmado que sufrió una filtración de datos masiva que afecta a miles de usuarios. La compañía notificó a sus clientes sobre el incidente mediante un correo electrónico, informando que los datos comprometidos incluyen información de tarjetas de crédito, correos electrónicos y números telefónicos. 

La brecha de seguridad ocurrió entre el 2 de abril y el 18 de mayo de este año y fue atribuida a una actividad no autorizada en una base de datos en la nube administrada por un proveedor externo.

Detalles de la filtración de datos

La información filtrada es preocupante, ya que no solo incluye datos personales como correos electrónicos y números telefónicos, sino también detalles sensibles de tarjetas de crédito. 

La empresa recomendó a los usuarios afectados estar atentos a actividades sospechosas en sus cuentas bancarias y estados de cuenta, además de tomar medidas preventivas como el bloqueo de cuentas y la solicitud de nuevas tarjetas.

La compañía indicó que descubrió la actividad no autorizada en una base de datos en la nube alojada por un proveedor externo. Esta base de datos contenía información personal limitada de algunos clientes que compraron boletos para eventos en Norteamérica, incluyendo Canadá, Estados Unidos y México. 

En respuesta a la brecha, Ticketmaster aconsejó a los usuarios monitorear sus cuentas para detectar cualquier actividad inusual y tomar medidas inmediatas para proteger su información financiera.

Reacción de las autoridades y consecuencias

El Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI) anunció que iniciará una investigación de oficio sobre la presunta divulgación de datos personales. 

Según la Ley Federal de Protección de Datos Personales en Posesión de los Particulares (LFPDPPP), las empresas privadas están obligadas a cumplir con estrictos principios y obligaciones para proteger los datos personales de los usuarios.

Además, el grupo de hackers conocido como ShinyHunters afirmó haber robado datos personales de 560 millones de usuarios de Ticketmaster y exigió un rescate de 500 mil dólares para no vender la información a terceros. Esta no es la primera vez que Ticketmaster se enfrenta a críticas por su manejo de datos y la seguridad de su plataforma.

La organización de consumidores en línea Tec-Check criticó duramente a Ticketmaster por su falta de protección de datos personales y otras prácticas abusivas, como la modificación de términos y condiciones durante la pandemia para evitar reembolsos y la venta de boletos supuestamente clonados. Estas acciones han llevado a una creciente desconfianza entre los consumidores hacia la empresa.

En Estados Unidos, Ticketmaster también enfrenta una demanda presentada por fiscales estatales y de distrito contra su empresa matriz, Live Nation Entertainment, por prácticas monopólicas en el mercado de eventos en vivo. Esta demanda busca la separación de Ticketmaster de Live Nation para reducir el control monopólico en el mercado de conciertos y venta de boletos.

Impacto en los usuarios y medidas de protección

El impacto de esta filtración de datos es significativo, ya que expone a los usuarios al riesgo de fraude y robo de identidad. Ticketmaster ha instado a los usuarios afectados a tomar medidas inmediatas para protegerse, como monitorear de cerca sus cuentas bancarias y estados de cuenta, y reportar cualquier actividad sospechosa a sus bancos.

Además, los usuarios pueden solicitar el bloqueo de sus cuentas y la emisión de nuevas tarjetas para prevenir cualquier uso fraudulento de sus datos. La empresa también ha enfatizado la importancia de estar atentos a posibles intentos de phishing y otros métodos de fraude que puedan surgir a raíz de esta brecha de seguridad.

Este incidente subraya la necesidad de que las empresas refuercen sus medidas de seguridad y protección de datos para evitar futuras filtraciones. La confianza del consumidor en las plataformas de venta de boletos y otros servicios en línea depende en gran medida de la capacidad de estas empresas para garantizar la seguridad de la información personal y financiera de sus usuarios.

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