La música influye en nuestro estado de ánimo respecto al pasado
La música no solo evoca recuerdos, sino que puede transformar su tono emocional, abriendo nuevas posibilidades terapéuticas y formas de reinterpretar el pasado
Escuchar música mejora tu estado de ánimo. Crédito: Tirachard Kumtanom | Pexels
Un estudio reciente sugiere que la música no se limita a evocar recuerdos puede alterar cómo los percibimos emocionalmente, cambiando su significado en nuestra memoria.
Esta investigación, liderada por un equipo interdisciplinario del Instituto de Tecnología de Georgia y la Universidad de Colorado en Boulder, explora el vínculo entre música, emoción y memoria, y plantea aplicaciones terapéuticas innovadoras.
Dirigido por una psicóloga del Instituto de Tecnología de Georgia, el estudio contó con la colaboración de Thackery Brown, mentor del proyecto, y las expertas en música Sophia Mehdizadeh y Grace Leslie.
Publicado recientemente, el trabajo examina cómo escuchar música mientras evocamos recuerdos puede infundirles nuevos elementos emocionales. Esta capacidad podría ser especialmente útil para ayudar a personas a manejar recuerdos difíciles, replanteándolos desde una perspectiva más positiva.
El estudio, basado en el concepto de reactivación de la memoria, parte de la premisa de que cuando un recuerdo se evoca, se vuelve temporalmente susceptible a modificaciones. El experimento desarrollado por el equipo se llevó a cabo durante tres días. En la primera etapa, los participantes memorizaban historias neutrales.
Al día siguiente, recordaban estas historias mientras escuchaban música positiva, negativa o en silencio. Finalmente, en el tercer día, se les pidió que recordaran las mismas historias, pero esta vez sin música. Durante la segunda sesión, la actividad cerebral de los participantes fue monitoreada mediante imágenes de resonancia magnética funcional (fMRI), una técnica que mide el flujo sanguíneo en el cerebro.
Los resultados revelaron un fenómeno, los participantes que escucharon música mientras recordaban historias tendieron a reinterpretarlas emocionalmente, en sintonía con el estado de ánimo evocado por la música.
Historias asociadas a la música
Por ejemplo, una historia neutral asociada a música alegre fue recordada posteriormente como más positiva, incluso cuando la música ya no estaba presente. Las imágenes cerebrales mostraron una notable interacción entre la amígdala, el centro emocional del cerebro, y el hipocampo, responsable del almacenamiento y recuperación de recuerdos. Esta conexión explica por qué ciertos momentos musicales se sienten tan profundamente significativos.
El estudio también descubrió que las áreas cerebrales involucradas en el procesamiento sensorial visual se activaban en sincronía con la música y las emociones evocadas. Esto sugiere que la música no solo altera cómo nos sentimos respecto a un recuerdo, sino que puede añadir detalles visuales y emocionales que transforman su naturaleza. En esencia, la música parece actuar como un “señuelo emocional”, entrelazándose con nuestras memorias y redefiniendo su significado.
Estos hallazgos tienen implicaciones prácticas tanto para la vida diaria como para la medicina. En el ámbito terapéutico, podrían abrir nuevas estrategias para tratar trastornos como la depresión o el trastorno de estrés postraumático.
En estos casos, los recuerdos negativos suelen ser abrumadores, y una intervención basada en música cuidadosamente seleccionada podría ayudar a reducir su carga emocional. Aunque se requieren más investigaciones para consolidar estas aplicaciones, la idea de utilizar la música como herramienta para modificar recuerdos representa un avance prometedor en la psicología y la neurociencia.
En el plano cotidiano, esta investigación destaca el impacto sutil pero significativo de las bandas sonoras personales en nuestras vidas. La música que escuchamos mientras vivimos o recordamos experiencias no solo influye en nuestro estado de ánimo inmediato, sino que puede estar moldeando la forma en que recordamos esos momentos en el futuro.
De esta manera, nuestras listas de reproducción favoritas podrían estar desempeñando un papel más profundo de lo que imaginamos en la construcción de nuestra identidad y percepción del pasado.
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